viernes, 1 de mayo de 2009

BIODEMOGRAFIA

Antrópologos integrados en el grupo GEPS

Dra. Sonia Colantonio
Cátedra de Antropología. Fac. de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales. Universidad Nacional de Córdoba, República Argentina. CONICET.

Dr. Vicente Fuster Siebert
Dpto. de Zoología y Antropología Física. Fac. de Biología, Universidad Complutense de Madrid.

www.ucm.es/info/geps/Biodemograf%EDa.doc

La Biodemografía, consiste en un enfoque integrador de la demografía y la genética de las poblaciones humanas, entendiéndose que se trata de un estudio cuantitativo. El interés por los aspectos biodemográficos de las poblaciones humanas puede considerarse como reciente, siendo infrecuentes los estudios publicados antes de los años 60-70.

La variación intra e interpoblacional de características demográficas, tales como el patrón reproductor y de supervivencia, puede estar relacionada con características biológicas. El comportamiento combinado de la fertilidad y de la mortalidad refleja las posibilidades de renovación de la población. La selección natural opera mediante diferencias en valor adaptativo, expresado por mortalidad diferencial y/o por fertilidad diferencial. En el primer caso, el genotipo seleccionado en contra se caracterizará por una menor esperanza de vida, de forma que el período reproductor puede verse acortado o incluso no se alcanza,.en el segundo.

Definir una población como el conjunto de individuos que se cruza y que comparte una dotación genética es más fácil teóricamente que en la práctica; las poblaciones no son sistemas totalmente cerrados. Solo una cuidadosa investigación demográfica de la estructura y dinámica de un grupo permitirá distinguir las unidades sociales y políticas de las verdaderas unidades biológicas. El sistema de cruzamientos está determinado por una serie de factores que limitan la elección de cónyuge debido a la edad, parentesco, religión, casta, tribu, etc.

En Biodemografía la migración suele expresarse como movimiento marital. Aunque los individuos se reúnen en grupos caracterizados por la tendencia a cruzarse con otros integrantes del grupo, los límites son difusos (por el comercio, medios de comunicación y migración, etc.), por lo que el aislamiento genético absoluto es excepcional. Desde un punto de vista genético, una gran movilidad reducirá la diferenciación local, y la distancia geográfica entre los lugares de procedencia de los cónyuges es un elemento restrictivo. Las distancias de migración pueden superar a las que definen el territorio y los efectos del flujo génico afectar a la estructura genética de esa población. La migración selectiva (por ej. de parientes) es un factor fundamental como determinante de la variabilidad genética del grupo.

En cada generación los individuos que se reproducen constituyen una muestra del genoma de la generación previa. En una población de efectivo muy reducido y aislada, las frecuencias génicas cambiarán simplemente como un proceso aleatorio que tiene lugar al transmitir los padres sus genes a la descendencia. En ausencia de otros factores, las poblaciones tenderán a hacerse progresivamente más diferentes, incluso si inicialmente eran homogéneas, proceso que se conoce como deriva genética

Desde una perspectiva biodemográfica “Estructura de la población” hace referencia a todos los factores que la conforman biológicamente y que contribuyen a su diversidad genética. Más concretamente, la estructura de la población considera los factores demográficos que determinan la dispersión de genes en el tiempo y en el espacio, así como la magnitud de la deriva genética. Cada población se caracteriza por una estructura única, de forma que su evolución sólo puede estudiarse en términos de su estructura y dinámica.

La estructura genética de las poblaciones humanas viene en gran medida determinada por el sistema de cruzamientos existente, el cual condiciona la procedencia de genes que en un momento dado van a contribuir a la siguiente generación. Los matrimonios ocurren en función de una amplia gama de factores de tipo sociocultural que a su vez se imbrican con condicionantes geográficos y demográficos. La estructura matrimonial de una población, y por lo tanto su estructura genética, es pues, un reflejo de todos ellos.

Los factores políticos pueden revelarse como condicionantes que favorezcan el contacto o distanciamiento de los individuos ya que pueden reforzar barreras de índole lingüístico, cultural o geográfico, que limiten el movimiento de los mismos, y así aminorar el flujo génico entre las poblaciones. En concreto, en las áreas situadas en estados diferentes, estos factores son particularmente interesantes porque pueden reflejar en cierta forma las características maritales de ambas poblaciones.

Información de tipo histórico-demográfico puede ser aplicada tanto a estudios sociales como de biología de las poblaciones, lo que posibilita el plantear proyectos interdisciplinares que combinen el conocimiento histórico de una población con el de su estructura biológica. A partir de registros escritos correspondientes a hechos vitales de poblaciones históricas pueden deducirse las pautas reproductoras características y las consecuencias que ellas han tenido sobre la variabilidad genética presente. Esto último puede lograrse, por ejemplo, utilizando como “marcadores de los movimientos de genes” datos relativos a los apellidos presentes en las parejas que contribuyen a cada generación, o a los lugares de nacimiento y de reproducción de los cónyuges. Basándose en el hecho de que en los sistemas familiares donde el primer apellido se adquiere a través del padre, la herencia de los apellidos de padres a hijos simula la herencia del cromosoma Y, Crow y Mange (1965) propusieron un método para estimar el parentesco y la consanguinidad en las poblaciones a través del uso de los apellidos paternos denominado "isonimia" (igual apellido en los miembros de la pareja). Estudios moleculares recientes sustentan sólidamente el uso de los apellidos como marcadores genéticos. Las relaciones de parentesco dentro de una población pueden también ser determinadas por un análisis de consanguinidad, tanto a través de genealogías como de dispensas matrimoniales.

Dada la importancia de las fronteras sobre las pautas de intercambio y reproducción de las poblaciones a nivel genético, surgió un proyecto titulado Influencia de los cambios políticos de la delimitación de fronteras entre España y Portugal sobre la estructura genética y demografía histórica de una población de Extremadura (MINISTERIO DE EDUCACIÓN CIENCIA. DIRECCIÓN GENERAL DE INVESTIGACIÓN (REFERENCIA CGL2004-00928/BOS) que constituye un aporte novedoso, ya que permitirá comparar dos situaciones contrastadas de una misma población en lo referente a sus límites administrativos, pero bajo unas condiciones geográficas inalteradas.

Para ello se eligió la población de Olivenza, situada al Oeste de la provincia de Badajoz, por ser de dominio alternativo entre Portugal y España (Tratado de Badajoz, 1801), lo que constituye un marco ideal para analizar en qué grado y forma el modelo marital se ha visto afectado por la existencia de fronteras (barreras de tipo político).

Nuestro planteamiento inicial surge de las siguiente cuestión: ¿presenta el modelo de cruzamientos inercia frente a cambios políticos de frontera, o bien es posible detectar consecuencias inmediatas? Ante las dos posibles respuestas: inercia o variación se plantean las siguientes hipótesis:

1. ¿Cual es el ámbito geográfico en el que tienen lugar dichos cruzamientos?

2. ¿Existe algún componente cultural que esté favoreciendo la celebración de algún tipo concreto de cruzamiento?

3. ¿ Es posible estimar el diferente peso de los factores geográficos y socioculturales considerando los apellidos que presentan los individuos?. ¿Cuál es el porcentaje de matrimonios con apellidos del mismo país de origen?, ¿se mantiene dicho porcentaje a lo largo del tiempo?. ¿Varía el factor de consanguinidad con el origen de los apellidos?.

Este estudio, por tanto, puede concretarse en una doble vertiente, la delimitación de fronteras que impone un cambio de demarcación política ¿produce cambios en la elección de pareja? Estos cambios ¿tienen únicamente que ver con la demarcación geográfica? O por el contrario, son mucho más profundos e introducen cambios culturales que se traducen en la preferencia y/o aversión de un cierto tipo de matrimonios, por ejemplo consanguíneos, frente a otros? ¿cómo puede haber repercutido esto sobre la estructura genética de la población?

Por otra parte, en las poblaciones históricas el estudio del parentesco y de la consanguinidad contribuye al conocimiento de los patrones de unión inter-cultural y de su evolución temporal tanto desde la perspectiva social como biológica, usando aquí el término parentesco, del mismo modo que el de consanguinidad, con un significado estrictamente biológico, no involucrando los lazos de diferente naturaleza que exceden estos límites.

Si se tiene en cuenta que la pareja y la familia son en el hombre el espacio natural de transmisión de genes y de pautas culturales a las generaciones siguientes, aquella será el objetivo lógico para descubrir el efecto de la cultura sobre el acervo genético de las poblaciones, y la reproducción en el seno de la misma condicionará el tipo de estructura biológica de la población a través del tiempo. De acuerdo a los patrones de pareja y familia presentes, las distintas poblaciones exhibirán diferencias que se traducirán en sus estructuras, las que condicionarán sus características biológicas.

Dado que la estructura genética encontrada a partir de apellidos se ha mostrado ser jerárquica (es decir la isonimia es más alta en los hogares, éstos se agrupan en barrios, en aldeas, parroquias, regiones, grupos étnicos o lingüísticos mayores hasta llegar al nivel de estados), será de gran interés en la América Hispánica describir los mecanismos selectivos que se han dado en los distintos grupos etno-sociales a través de la elección de pareja. Para ello, los censos históricos son una fuente rica en información, ya que están todas las personas identificadas con nombre y apellido, y el empadronamiento censal ha sido en general por hogar y cercanía geográfica.

En Argentina, y especialmente en la Ciudad de Córdoba, los estudios históricos muestran que las familias españolas y sus descendientes blancos siguieron pautas diferenciales respecto de los otros grupos étnicos que coexistían con ellas (indígenas, negros, mestizos, y otras múltiples mezclas de ellos). Desde los primeros tiempos de la colonización de América, la Corona española manifestó su preocupación por la preservación de la comunidad conyugal, y la regulación del matrimonio en Indias respondió a la ley canónica hasta el último tercio del siglo XVIII. Simultáneamente, la Corona trató de evitar las uniones desiguales, muestra de lo cual fue la Real Pragmática de Carlos III en 1776, que exigía el consentimiento de los padres para casamientos de menores de 25 años. También el proceso independentista tuvo impacto sobre la estructura de las familia y de las parejas, fundamentalmente a través de un Decreto de abril de 1817 que prohibió a las mujeres americanas blancas contraer matrimonio con españoles europeos que no poseyesen carta de ciudadanía, ya que era frecuente que éstos concretasen uniones con criollas o descendientes de anteriores españoles con los que unían lazos de amistad, parentesco o laborales.

A pesar de lo anterior, el proceso de mestizaje continuó produciéndose, con frecuencia bajo la forma de uniones ilegítimas. Los cambios históricos y legislativos ocurridos habrían condicionado entonces pautas de elección de cónyuge diferenciales en el tiempo, en los grupos étnicos involucrados y, tal vez, en las formas de unión según hayan sido legitimadas o no por la Iglesia. Esta influencia seguramente ha debido reflejarse en la variabilidad biológica de estos grupos, hecho que puede descubrirse mediante la aplicación de la isonimia, lo que ha dado pie, bajo la dirección de S. Colantonio, a una serie de proyectos de investigación sobre el USO DE APELLIDOS Y ESTRUCTURA BIOLÓGICA DE LA POBLACION HISTORICA DE CORDOBA (ARGENTINA): CONTRIBUCION ESPAÑOLA Y AMERICANA (MINISTERIO DE EDUCACIÓN, CULTURA Y DEPORTE. PROGRAMA DE COOPERACIÓN CIENTÍFICA CON IBEROAMÉRICA; SECYT, UNIV. NAC. DE CÓRDOBA ARGENTINA, RESOLUCION 62/03; UNIVERSIDAD NACIONAL DE CÓRDOBA. PROYECTO: 04-12494 A)

Los anteriores proyectos se relacionan directamente con la línea de investigación desarrollada previamente por los mencionados investigadores, en los que se ha estudiado la estructura de la población de la Sierra de Gredos (Avila) mediante un análisis de consanguinidad por dispensas eclesiásticas e isonimia, respecto a las características geográficas y demográficas de cada localidad. Esa misma idea se ha aplicado al conjunto de España, dando lugar a una revisión actualizada de este tema en nuestro país.

Desde que se inició la colaboración de este grupo, se han publicado múltiples artículos, de los que destacamos las siguientes: Hum. Biol. (5), Am. J. Hum. Biol. (2), J. Biosoc. Scie. (3), Rev. Dem. Hist. (1), Rev. Arg, Dem. (1) y J. Basic & Applied Genetics (1).