jueves, 30 de julio de 2009

El diagnóstico genético preimplantacional (DGP)

El DGP resulta de la combinación de las técnicas de fecundación (FIV) y las técnicas de genética molecular.
safor guia_29/07/2009





¿Qué es el DGP?
El diagnóstico genético preimplantacional (DGP) es una técnica diagnóstica que permite detectar determinadas anomalías genéticas en el embrión y transferir al útero materno los embriones genéticamente normales para los cromosomas estudiados.
El DGP resulta de la combinación de las técnicas de fecundación (FIV) y las técnicas de genética molecular. Los avances de estas dos especialidades han permitido el desarrollo del DGP como alternativa eficaz al diagnóstico prenatal en parejas con un riesgo elevado de transmitir a su descendencia una determinada enfermedad genética o anomalía cromosómica. Aproximadamente uno de cada 200 bebés nace con una anomalía cromosómica.
La primera gestación de una niña por DGP fue en 1993, por lo que es una técnica relativamente nueva. Existen otras técnicas muy innovadoras asociadas al DGP, como es la aspiración de fragmentos y la eclosión asistida.
¿En qué casos se realiza o está indicado el DGP?
- Pacientes portadores de translocaciones cromosómicas.
- Pacientes portadores de enfermedades genéticas ligadas al sexo.
- Pacientes con antecedentes de dos o más abortos espontáneos.
- Mujeres de edad reproductiva avanzada (mayores de 37 años).
- Pacientes estériles de programas de FIV con repetidos fallos de implantación.
- Pacientes con factor masculino severo.
¿Cuáles son las causas de las anomalías cromosómicas?
Por lo general, las anomalías cromosómicas son resultado de un error producido durante el desarrollo de un óvulo o célula espermática. Se desconocen las causas de estos errores. Sin embargo, hasta donde se sabe, nada de lo que haga o deje de hacer cualquiera de los padres antes del embarazo o durante su desarrollo puede causar una anomalía cromosómica en su hijo. Las células espermáticas y los óvulos son diferentes de las demás células del organismo. Estas células reproductoras sólo tienen 23 cromosomas individuales. Cuando un óvulo se une con una célula espermática —y comienza el embarazo— forman un óvulo fertilizado con 46 cromosomas.
Pero algunas veces algo sale mal antes de que comience el embarazo. Durante el proceso de división celular se produce un error que hace que un óvulo o célula espermática quede con una cantidad de cromosomas mayor o menor de lo normal. Cuando esta célula con una cantidad incorrecta de cromosomas se une con un óvulo o célula espermática normales, el embrión tiene una anomalía cromosómica. Un tipo común de anomalía cromosómica es la trisomía, que se produce cuando una persona tiene tres copias, en lugar de dos, de un cromosoma específico. El síndrome de Down es un ejemplo de trisomía. Por lo general, las personas con síndrome de Down tienen tres copias del cromosoma 21.
En la mayoría de los casos, los embriones que tienen una cantidad incorrecta de cromosomas no sobreviven. En estos casos, la mujer embarazada tiene un aborto espontáneo, con frecuencia sin saberlo. Hasta el 70% de los abortos espontáneos producidos durante el primer trimestre del embarazo se debe a anomalías cromosómicas.
También pueden tener lugar otros accidentes, por lo general antes de que comience el embarazo, que podrían alterar la estructura de uno o más cromosomas. Aunque una persona tenga la cantidad normal de cromosomas, puede ocurrir que pequeños segmentos de uno o más cromosomas se eliminen, se dupliquen, se inviertan, alteren su ubicación normal o se intercambien con parte de otro cromosoma. Estas alteraciones estructurales también pueden producir la pérdida del embarazo y defectos de nacimiento.
¿Cómo se realiza el DGP?
Los embriones obtenidos por fecundación in vitro se cultivan hasta el tercer día de vida, en este momento tienen entre 6 y 8 células. Todas estas células en principio son genéticamente iguales. Se practica un orificio en la membrana externa (llamada zona pelúcida del embrión) y se extrae una célula que se analiza. El embrión se transfiere un día después.
¿Cómo se realiza esta biopsia?
Se puede realizar de dos formas:
- con ácido
- con láser
El fin de los dos es hacer un agujero en la capa de la célula, perfectamente delimitado, para evitar que se salgan mas células de las que queremos sacar, estas células las sacamos por aspiración con mucho cuidado para no romperlas, porque el hueco es muy estrecho.
¿Cuántas células se pueden sacar del embrión sin que peligre su vida?
En el caso de que el embrión tenga de 6-8 células se suele sacar 1 o 2 como máximo.
¿Cuánto tiempo se tarda en saber el estado genético del embrión?
El día que se extrae la blastómera (célula del embrión), se realiza la técnica genética adecuada a cada caso y obtendremos un resultado en el mismo día, máximo en dos, dependiendo de la hora de la fecundación se hará la extracción de la blastómera.
Y mientras se hace el estudio, ¿estos embriones dónde están, qué se hace con ellos, se congelan o se deja que se desarrollen más tiempo?
Siempre tenemos el riesgo de que se mueran si alargamos el proceso, porque como muchas veces hemos dicho, como en el útero no están en ningún sitio, pero mientras obtenemos el resultado, los embriones se encuentran en un medio especial para ese tercer día, en una incubadora con una temperatura, humedad y CO2, intentando imitar las condiciones del útero materno.
¿El DGP requiere que la pareja se someta a alguna técnica?
Sí, la pareja debe realizar una fecundación in vitro (FIV), exactamente una ICSI, ya que debemos obtener los embriones para poder realizar la biopsia, y la única forma de obtener embriones en el laboratorio es con la FIV, además es mejor realizar ICSI, porque así evitamos contaminación de la blastómera. Ya que al microinyectar un solo espermatozoide evitamos, como en la FIV, que se queden espermatozoides pegados al óvulo y corremos el riesgo de que nos contamine la muestra a la hora de extraer la célula del embrión, esto con la ICSI lo evitamos.
¿Es necesario entonces alguna medicación especial en la mujer para realizarse el DGP?
No, se debe realizar la técnica antes mencionada, la ICSI, y ahora vamos a explicar en qué consiste. Primero se debe realizar un estudio de los dos miembros de la pareja, tras este estudio se empezaría con una estimulación de los ovarios. Esta estimulación se hace a través de una medicación hormonal que la paciente debe ponerse diariamente durante 10 días aproximadamente. Durante estos días tendrá que venir a la clínica asiduamente para controlarla y hacerle analíticas de sangre para medir el estradiol, que es la hormona que nos dice como van los ovarios. También le haremos una ecografía para ver los folículos y su tamaño.
Cuando el tamaño sea el adecuado y los folículos estén a punto de madurar, pararemos esta medicación y se provocará la ovulación; a las 36 horas se extraerán los óvulos en quirófano, bajo sedación, y posteriormente se microinyectarán en el laboratorio con los espermas del marido o del donante. A partir del tercer día se realizará el DGP.
¿De qué depende que una pareja se haga el DGP?
Existen varios casos. Uno de ellos va ser buscando una enfermedad específica, que uno de los padres la padezca o sea portador de ella aunque no la padezca (recesiva), en este caso antes de empezar el tratamiento debe realizarse un estudio de informatividad, es decir, que vamos a analizar su sangre y estudiar su caso específico, ya que una misma enfermedad puede ser diferente en personas distintas. Después de este estudio ya se podría comenzar con el tratamiento para la FIV.
Hace algunos años, al principio de utilizar esta técnica, se usaba solo para estos casos, pero con el tiempo se está utilizando también en otros casos. Por ejemplo, en parejas que han padecido varios abortos espontáneos o fallos repetidos de FIV.
¿Por qué se hace en parejas con abortos repetidos?
Teniendo en cuenta que más del 70 % de lo abortos se producen por causa genética, la mayoría de las mujeres a lo largo de toda su vida habrán padecido alguno, sin que ni siquiera se hayan dado cuenta.
Como comentábamos en el caso de que una pareja se quede embarazada y de forma espontánea aborte, esto nos está indicando que los embriones que se implantan no están bien genéticamente. Por lo que si los analizamos y vemos los que están sanos y son estos los que transferimos, evitaremos este tipo de aborto.
Y en el otro caso que habías dicho, parejas con fallo repetido de FIV, en este caso por qué se hace.
En este caso se hace porque se sospecha que el embrión no se implanta por alguna causa genética o bien se implanta pero a los pocos días muere, sin que ni siquiera se pueda saber si se ha producido implantación.
¿Puede un pareja que aparentemente no tiene ningún problema hacer un DGP?
Sí puede, hay parejas que por tener una edad límite, prefieren no arriesgarse y realizar un análisis genético del embrión.
¿Se sabe el sexo de los embriones con esta técnica?
Nosotros sí lo sabemos, ya que analizamos también los cromosomas sexuales, la X y la Y, para descartar enfermedades de este tipo.
¿Los padres lo saben antes de ser transferidos al útero?
No, está prohibido. No es legal en España que los padres puedan elegir el sexo del bebé. El equipo médico, lógicamente lo sabe, pero no debemos dejarnos influenciar por los deseos de la pareja, ya que elegimos a los embriones mejores morfológicamente, sin saber el sexo de cada uno de ellos.
Después del DGP y una vez embarazada la mujer, ¿debe someterse a una amniocentesis?
Sí, si está indicado por edad o riesgo se debe realizar, ya que estamos hablando de mujeres o parejas con alto riesgo de transmitir enfermedades, por lo que realizar el DGP no exime de realizar una amniocentesis.
¿El DGP aumenta las probabilidades de embarazo?
Sí, porque nos permite transferir a la paciente sólo los embriones sanos. Las probabilidades de implantación de un embrión óptimo son más altas.
¿Y reduce las de aborto?
Sí, disminuye el número de abortos espontáneos ya que la mayoría se deben a alteraciones genéticas.
¿Se analizan todos los cromosomas del embrión?
No. El embrión tiene 23 pares de cromosomas, algunos son tan importantes que su alteración impide ya las divisiones iniciales del embrión. Los 9 cromosomas que están afectados más frecuentemente son: 13, 15, 16, 17, 18, 21, 22, X e Y. En los pacientes portadores de una enfermedad genética determinada, el análisis genético del embrión se dirige a estudiar ese gen específicamente. Por lo que es importante recalcar que en algunos casos se estudiarán varios cromosomas (los más comunes) y otros casos estudiaremos directamente un tipo de alteración genética.
¿Existe algún riesgo en el DGP?
No poder realizarlo porque los embriones no han sobrevivido, este caso ocurre cuando tenemos de partida pocos óvulos y por tanto pocos embriones.
Podría darse mosaicismo, es decir, que la muestra que se extrae de la biopsia no sea representativa del embrión. En muy pocas ocasiones sucede que la célula que extraemos del embrión es normal y las demás anormales, por lo que se produce un mosaicismo, pero como ya he dicho esto sucede en muy pocas ocasiones.
Cuando analizáis los embriones, ¿el porcentaje de embriones sanos es muy alto?
Pues desgraciadamente no lo es, en el mejor de los casos el 50%, pero normalmente son sanos el 30-40%.
¿Cuáles son los requisitos indispensables para poder realizar esta técnica?
Obtener un numero elevado de embriones.
¿Cómo contempla la ley esta técnica en estos momentos?
Según la Ley del 16 de febrero de 2006 sobre Técnicas de Reproducción Asistida no ha sido todavía publicada en el BOE, pero en su aprobación en el Congreso de los Diputados, con la oposición parcial del PP, modificaba los siguientes puntos de la Ley del 2003, que a su vez modificaba a la Ley 35/1988.
Límite de ovocitos.
Esta reforma elimina el límite al número de ovocitos que se pueden fecundar en cada ciclo, dejándolo en el criterio de cada médico. El número máximo de embriones que se pueden implantar sigue siendo 3.
Embriones sobrantes.
La pareja decidirá si los quiere congelar para usarlos en un futuro, donarlos a otras parejas.
Utilizar el útero de otra mujer para la gestación, y la clonación con fines reproductivos, siguen siendo ilegales.
Diagnóstico genético preimplantacional.
Podrá generarse un hijo sano cuyos tejidos sean compatibles con los de su hermano enfermo para poder, en un futuro, curarlo (técnicas preimplantacionales con fines terapéuticos para terceros), siempre que esté autorizado por la Comisión.
¿Cuáles son las alternativas al diagnóstico genético preimplantacional?
Algunas parejas que no pueden o no quieren realizar un diagnóstico genético preimplantacional suelen recurrir a las siguientes alternativas:
- Diagnóstico prenatal en embarazos naturales (sin recurrir a fecundación in vitro).
- Inseminación artificial con gametos donados.
- Adopción.
- Embarazo natural confiando en las probabilidades de que el niño nazca sano.

Dra. Antonia González Fernández
Instituto de Reproducción de la Marina Alta (IREMA)