Ciudad de México, 12 de Noviembre.- La disciplina tanto en la alimentación como en la práctica de ejercicio es indispensable para tener una vida más saludable y longeva, aseguró el investigador Terry Grossman, quien pretende desafiar al tiempo y prolongar la longevidad con una apariencia juvenil.
El secreto más sencillo garantizado contra el envejecimiento, la obesidad y el sobrepeso radica en eliminar el azúcar refinada de la dieta, reducir el consumo de alimentos con altos niveles calóricos, ayuno de 12 horas y hacer 20 minutos de ejercicio aeróbico diario, reveló.
Durante su participación en el festival La ciudad de las ideas, que se llevará a cabo en esta ciudad durante los próximos tres días, dio ejemplos de su investigación e, incluso demostró su teoría con su propia apariencia, pues aunque tiene 63 años luce más joven.
En el acto, que se lleva a cabo en el Complejo Cultural de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, Grossman expuso que el envejecimiento de las hormonas que provocan la vejez se puede detener con esos sencillos consejos.
Resaltó que el consumo de té verde, semillas de uvas y vino tinto ayuda a prevenir el envejecimiento y tener una expectativa de vida más larga y saludable, lo cual se debe complementar con ayuno de 12 horas, y comer ensaladas sin aderezos como platillo principal el mayor número de días.
Esas recomendaciones ayudan a retrasar el envejecimiento de las hormonas que se acelera por la falta de ejercicio, dijo, y aseguró que con su investigación ha comprobado que siendo disciplinado se logra obtener una vida más longeva y saludable.
En el encuentro, en el que participarán más de 33 expertos denominados como mentes brillantes y que es organizado por la organización ciudadana Poder Cívico, que preside Andrés Roemer, sostuvo que el problema de obesidad que se registra a nivel mundial, es causa del aumento en el consumo de alimentos con alto contenido calórico, que es mayor a 400 y 500 calorías por comida.
El aumento de comidas de ese tipo, agregó, es tan nocivo que ya afecta a los niños, quienes ahora padecen obesidad y de no frenar esa situación los menores tendrán expectativas de vida mucho menores a la de sus padres.
El problema se debe sobre todo, subrayó, al alto consumo de azúcar y a la falta de ejercitación aeróbica.
Por ello, sugirió hacer 20 minutos diarios de ejercicio arduo, pero empezar dos minutos corriendo, otros dos minutos caminando, descansar un minuto y luego correr rápido durante 10 minutos; luego, descansar un minuto y volver a correr el resto del tiempo en forma rápida.
Grossman comentó que un estudio demostró que quienes basan su dieta en alimentos de ese tipo y se disciplinan en la práctica de ejercicios redujeron hasta en 40 por ciento el problema de obesidad y los infartos.
Asimismo, ejemplificó que la población de Okinawa, en Japón, vive con restricciones calóricas en su alimentación, por ello está demostrado que viven más tiempo y con mejor calidad de vida; y además de comer poco, como parte de sus oraciones antes de sus comidas piden por tener un estómago 80 por ciento menor.
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El artículo es de mucho interés para conocer de una manera muy sencilla los efectos de la dieta y del ejercicio físico en la longevidad,es novedosa la aportacíon del ayuno de 12 horas como elemento que contribuye al control de la obesidad.
José Miguel Rodríguez-Pardo del Castillo
