martes, 21 de diciembre de 2010

«El límite de vida de la especie humana está cifrado en un millón de horas, unos 122 años»

Oviedo, E. G.

Carlos López Otín habló a los jóvenes de Shinya Yamanaka, el científico japonés que ha logrado reprogramar las células «y volverlas atrás en el tiempo». Para explicar el proceso se refirió a «El curioso caso de Benjamin Button», la película protagonizada por Brad Pitt en la que se explicaba una evolución al revés, es decir, de anciano a niño. «Tomemos, dijo Otín, una célula de una mano de una persona adulta. Una célula que se va a morir y que va a ser sustituida por otras. Si reactivamos una serie de genes, esas células empiezan un viaje de recuperación al pasado embrionario. Reprogramamos nuestras propias células, por tanto no hay debate ético».

«Pero que nadie os venda sueños de inmortalidad. La medicina regenerativa para aplicaciones terapéuticas es, por ahora, tan sólo una esperanza. Los que saben mucho de esto ponen plazos largos».

Carlos López Otín cifró en un millón de horas el límite de vida de la especie humana: «son más o menos 122 años, que es lo que está documentado que ha vivido la persona más longeva que se conoce. Pero todavía estamos lejos, de manera global, de ese límite de edad al que ya han llegado algunos. Estamos ante las primeras oportunidades de extender la longevidad. Pero el reto no es sólo vivir más, sino vivir mejor y que la vida sea rica en todas sus dimensiones».

http://www.lne.es/sociedad-cultura/2010/11/16/limite-vida-especie-humana-cifrado-millon-horas-122-anos/994952.html