El Comité de Bioética de España ha anunciado hoy que publicará dentro de dos meses un documento que defenderá la necesidad de cambiar la legislación vigente relativa al aborto para poner en marcha una ley de plazos.
Este anuncio lo ha realizado su presidenta, Victoria Camps, que ha comparecido hoy en Gijón en rueda de prensa junto a otro de los miembros del comité, Marcelo Palacios, tras la reunión celebrada por el pleno de este órgano consultivo.
La portavoz ha explicado que existen diferentes sensibilidades y posiciones en el seno del comité y ha indicado que todas las opiniones figurarán en el documento.
No obstante, ha adelantado que el texto tratará de explicar a los ciudadanos por qué es necesaria una reforma y las ventajas que presenta una normativa de plazos.
Además, intentará justificar los motivos por los cuales el aborto ha de pasar de concebirse como un delito a considerarlo un "reconocimiento a la autonomía reproductiva de la mujer".
"Si pensáramos que el anteproyecto no es correcto daríamos otro sentido a nuestra intervención, lo cual no implica que todos los miembros deban suscribir nuestras conclusiones", ha dicho.
De hecho, ha considerado positivo que en el propio comité existan discrepancias porque supone el reflejo de una sociedad que carece de una opinión "unánime".
Camps ha dado prioridad al inicio de un "debate social" sobre el anteproyecto de ley, aunque ha advertido de que el comité decidió analizar el aborto antes de conocer el anuncio de la reforma legislativa.
La despenalización actual, ha explicado, carece de plazos para la interrupción del embarazo una vez justificado el daño psicológico de la futura madre, una carencia que se convierte en un "coladero" de casos.
La presidenta del comité considera "inevitable" que se politice el aborto al estar en marcha una reforma de la ley, pero ha lamentado que muchas veces los ciudadanos sólo reciban los aspectos "anecdóticos" del debate.
Así, ha explicado que su tarea es contribuir al debate de un tema "histórico" y ha reconocido que se trata del tema con más repercusión mediática y con mayor resonancia social.
Camps ha reconocido que la ética depende de los países y de las épocas aunque ha apuntado que cada vez se tiende más a acudir a criterios universales en defensa de la justicia.
Con todo, ha reconocido que las tradiciones y las coyunturas sociales generan dudas y ha enmarcado en esta situación la polémica en torno al debate.
Palacios ha señalado que, a pesar de ello, tres cuartas partes de los países del mundo han despenalizado la interrupción del embarazo.
Los doce componentes del comité han abordado otros asuntos a lo largo de la sesión, entre ellos la creación de bancos de cordón umbilical y el derecho de objeción de conciencia de los médicos al aborto.
El presidente de la Sociedad Internacional de Bioética (SIBI) ha defendido la libertad de las personas para decidir qué hacer con una células que pueden redundar en beneficio propio y la forma de regular su uso y ha anunciado que el comité elaborará otro documento sobre este asunto aunque aún no ha decidido su postura.
Los expertos han exigido la puesta en marcha de una ley que regule la objeción de conciencia de los médicos ya que se trata "de un derecho pero repercute en terceras personas por lo que debe tener una normativa", ha dicho Camps..