domingo, 14 de febrero de 2016

Los nuevos modelos de pricing avanzado en el horizonte de sucesos.

La medida de una contingencia objeto de cobertura de seguro, incorpora cada vez más técnicas estadísticas y computacionales complejas. El resultado de este proceso es una capacidad predictiva del riesgo muy robusta, lo que contribuye a la fortaleza en la solvencia de la entidad aseguradora y un mejor posicionamiento competitivo en el mercado.
Apostar por estos modelos no es una decisión exclusiva del responsable de determinar el precio del seguro, es una decisión estratégica de la dirección de la entidad habida cuenta las consecuencias gerenciales que conllevan estos modelos ya que significa una nueva forma de entender el riesgo.
De alguna manera esta decisión, la podríamos asimilar a la escena de la película Interestelar cuando el protagonista Cooper entra en un agujero negro y dice: Estoy cruzando el horizonte de sucesos. Este término definido desde la física teórica, que sigue sometido a estudio y especulación, entre otros por el mismo Hawking, hace referencia a  todo suceso actual o pasado situado tras el horizonte de eventos, no forma parte del universo observable actual. 

En nuestro En el ecosistema del riesgo podemos entender el horizonte de sucesos como el punto no retorno.
La adopción de estos modelos avanzados  por parte de las aseguradoras que permiten observar una nueva realidad, es relativamente reciente, además de la mera decisión estratégica debe ir acompañada  de responsables de pricing capacitados para modelar los riesgos con estas técnicas. Este proceso requiere tiempo y teniendo en cuenta los nuevos modelos más complejos que se vislumbran como más potentes necesitaremos nuevos perfiles profesionales que ya se conocen como Data Scientist ,perfil que aglutina conocimientos de economía, programación y matemáticas.
La industria del seguro ya ha apostado por el uso de estas técnicas avanzadas, en España el primer modelo implantado en la industria data del año 2001, realizado para pricing de autos, y paulatinamente su uso se ha generalizado  en los seguros de masa de daños y no tanto en seguros personales. Al mismo tiempo, desde las instituciones que forman profesionales del riesgo, como actuarios, incorporan en la actualidad en sus programas formativos el manejo de estos modelos como lo son los conocidos GLM´S o modelos lineales generalizados.
Ahora bien, las técnicas, las variables a analizar y la capacidad de computación se encuentran en continuo proceso de cambio y permite escalar hacia modelos más sofisticados desde los modelos GLM´S construidos con variables internas del riesgo.
Si nos referimos al uso de variables, la incorporación de variables externas, con técnicas de geolocalización (GIS), como sociodemográficas y/o de fenómenos de la naturaleza puede hacer mejorar la capacidad predictiva de un modelo hasta 3 puntos por encima del mero uso de variables internas. Por otra parte, el análisis con variables de comportamiento humano en el riesgo, tiene también capacidad predictiva contrastada y así pueden mejorar hasta 4 puntos la capacidad predictiva. Los primeros  modelos de comportamiento que se están implantando consideran que la proporción adecuada de variables debe ser 80% de riesgo intrínseco y un 20% de comportamiento
Pero además, las técnicas predictivas empiezan a utilizarse en procesos de renovación segmentada, en técnicas de elasticidad al precio, en prevención de fraude, en prevención de caída de cartera y mediante ingeniería inversa en competitividad de la tarifa.
Y por último, los modelos conocidos como Machine Learning de inteligencia artificial (IA) están llamados a irrumpir en la modelización avanzada del riesgo, para ello necesitamos un periodo de maduración razonable en la curva de aprendizaje, si bien ya se ha contrastado su bondad en trabajos académicos e incluso se ha implantado en la industria desde 2014 para modelar el riesgo de caída de cartera en una entidad para el seguro de autos. Se estima que la capacidad predictiva de este tipo modelos de IA, en una base de datos dividida en un 70% para entrenamiento y un 30% para contraste del modelo, puede llegar al 90%-95%, superando los modelos de GLM´S más robustos que pueden estar entre el 80%-85%. La inteligencia artificial en todas sus distintas versiones en la próxima década veremos cómo se asienta como complemento o incluso alternativa a la técnica GLM´S.
Aprovechamos la ocasión para recordar a Marvin Misnky uno de los padres de la inteligencia artificial que falleció el pasado 24 de enero de 2016 quien la definió como “La ciencia que hace que las máquinas hagan cosas que requerirían inteligencia si las hubiera hecho un humano”.
El panorama presente y futuro del uso de modelos avanzados en el horizonte de sucesos, nos posibilita categorizar a la gestión del riesgo en cuatro niveles atendiendo a su nivel de complejidad.
- Entidades que modelan el riesgo con métodos tradicionales, sin uso de técnicas predictivas.
- Entidades que modelan el riesgo con el uso de técnicas GLM´S con variables internas.
- Entidades que modelan el riesgo con el uso de técnicas GLM´S o GAM con variables internas ,externas, técnica GIS , de comportamiento, y extienden el uso de los modelos predictivos a todas las áreas de negocio,  análisis de caída, competitividad....
-Entidades que modelan el riesgo con técnicas de inteligencia artificial (IA) y con el uso de variables internas, externas y de comportamiento. El alcance de los modelos de inteligencia artificial podría a su vez diferenciar más niveles de complejidad, recordamos el post publicado https://www.redcumes.com/blog/2015/11/04/actuarios-frecuentistas-vs-actuarios-bayesianos/ donde hacíamos referencia a diferentes técnicas de aprendizaje automático y de computación cognitiva.
Tenemos que tener presente que un modelo predictivo requiere al menos tres-cuatro años para demostrar su bondad , por lo que el paso de un nivel a otro necesita contraste de modelos en el tiempo, y no es posible como decía Martin  Heidegger saltar por encima de un estado a otro.
Según el estado donde se encuentre cada entidad podrá evaluar su fortaleza de mercado sobre la base de su técnica actuarial aplicada.

José Miguel Rodríguez-Pardo