20MINUTOS.ES. 02.11.2009 - 23.38 hUn juez italiano ha rebajado la condena impuesta a un hombre por asesinato por tener cinco genes relacionados con la conducta violenta. Es la primera vez que una autoridad judicial europea considera la predisposición genética como un atenuante, según informa la publicación científica Nature. Sin embargo, otros expertos consultados por la revista no están de acuerdo con la decisión italiana.
Aún no conocemos por completo el funcionamiento de los genes y el posible efecto protector de unos sobre otros
El musulmán Abdelmalek Bayout, un argelino que ha vivido en Italia desde 1993, confesó en 2007 haber asesinado a puñaladas al colombiano Walter Felipe Novoa Pérez tras una discusión. La víctima había criticado el hecho de que el argelino tuviera maquillaje en los ojos, algo que usaba con fines religiosos.
El juez de primera instancia le impuso una condena de 9 años y dos meses de prisión, que ya incluía un atenuante, pues aceptó el argumento de la defensa de que el detenido estaba afectado mentalmente en la época del suceso.
Informe neurocientífico
Sin embargo, en la apelación, el juez Pier Valerio Reinotti pidió un informe a los neurocientíficos Pietro Pietrini, de la Universidad de Pisa, y Giuseppe Sartori, de la de Padua. Ellos encontraron anormalidades tanto en los escáneres del cerebro del reo como en cinco genes relacionados con la conducta violenta.
Los dos científicos concluyeron que los genes de Bayout lo hacían más proclive a responder violentamente a las provocaciones. "Cada vez hay más pruebas de que algunos genes, ante un insulto, pueden predisponer a las personas a ciertas conductas", señaló Pietrini.
Con base a esa conclusión, el juez Reinotti le quitó en septiembre un año a la sentencia de Bayout, argumentando que sus genes "le hacen particularmente agresivo en situaciones tensas".
Los científicos, en desacuerdo
Sin embargo, varios científicos consultados por Nature cuestionaron la decisión. "Aún no conocemos por completo el funcionamiento de los genes y el posible efecto protector de unos sobre otros", dijo Giuseppe Novelli, un científico de la Universidad Tor Vergata de Roma.
Otro problema es que el comportamiento de algunos genes varía según el grupo étnico. "Si el defendido tiene un ancestro africano, podemos preguntarnos qué tan bien sus genes se relacionan con su conducta personal", argumentó Terrie Moffitt, del Instituto de Psiquiatría del King's College de Londres