miércoles, 20 de agosto de 2014

¿Se puede revertir el envejecimiento?

Publicado en el diario Teinteresa 20-8-2014


Esta cuestión la tenemos que responder desde la unidad de medida real del envejecimiento definida a través de la edad biológica y no con la edad cronológica-la que se mide desde nuestra de nacimiento.
La edad biológica, que se mide mediante un algoritmo que  combina un conjunto de biomarcadores predictivos  genéticos y no genéticos con métricas de estilo de vida saludables. Con el profesor e investigador  Antonio López Farré director científico de esta sección he trabajado para la creación de este algoritmo de edad biológica.
Ahora bien, la cuestión que tratamos es si se puede retrasar la edad biológica, la respuesta es que  en efecto, se puede revertir cierto grado de envejecimiento sobre todo el asociado a los hábitos de vida saludables. Y además se puede medir, cuando utilizamos algoritmos de vida biológica podemos predeterminar los años vida recuperables  y en el caso de los biomarcadores de longevidad podemos contrastar el rejuvenecimiento como sería el caso del principal, que no único, medidor del envejecimiento humano que son los telómeros –extremos de los cromosomas
Esta visión que es novedosa y reciente se ha podido verificar en estudios científicos que han constatado  que al cambiar los hábitos de vida la longitud de los telómeros se han recuperado.

José Miguel Rodríguez-Pardo


Leer más:  ¿Se puede revertir el envejecimiento?  http://www.teinteresa.es/microsite/Pregunta_al_medico/biometria/Se_puede_

lunes, 18 de agosto de 2014

¿Que hábitos de vida favorecen la longevidad?

Varios son los hábitos de vida saludable que han demostrado de una manera científica en la mayor longevidad de los humanos. Desde esta sección del diario teinteresa.es hemos tratado cómo determinados estilos de vida pueden añadir años de vida y saludable.
Algunos de estos factores no son fácilmente modificables como son el estado civil, la zona de residencia, el nivel de renta o de formación entre otros. Pero es verdad que otros son fácilmente modificables, la  American Heart Association en relación con el estado de salud cardiovascular ideal, cuando define los 7 Básicos de la Vida ( Life´s Simple 7) y que ciertamente contribuyen a una mejor longevidad:
  No fumar o haber dejado de fumar hace 1 año.
  Un índice de masa corporal IMC, ≤25 kg/m2.
  Hacer ejercicio moderadamente intenso durante ≥150 minutos a la semana o 75 si el    ejercicio es vigoroso.
  Consumir una dieta saludable que incluya de 4 a 5 de los siguientes componentes:
  Ingesta < 1,5 g/día de sal.
  Ingesta de bebidas azucaradas < 1 litro por semana.
  De 4 a 5 piezas de fruta y vegetales al día.
  Ingesta de 6 o más cucharadas soperas de fibra por día.
  Mantener los niveles de colesterol < 200 mg/dl.
  Mantener la presión arterial por debajo de 120/80 mmHg.
  Mantener los niveles de glucosa en sangre por debajo de 100 mg/dl


Publicado en el diario Teinteresa el 18 de agosto de 2014.

José Miguel Rodríguez-Pardo.


Leer más:  ¿Qué hábitos de vida favorecen la longevidad?  http://www.teinteresa.es/microsite/Pregunta_al_medico/biometria/Que_habitos_de_vida_favorecen_la_longevidad_0_1177682880.html#WaQ1VcJ2mwNtYrLt

LA PREDICCIÓN DEL RIESGO EN EL SEGURO PASA POR LOS ESTUDIOS GENÉTICOS


En el número del mes de agosto de la Revista Mediario del colegio de Mediadores de Seguros de Barcelona se ha publicado el artículo de referencia.






viernes, 8 de agosto de 2014

¿ Como será la curva de supervivencia más allá del año 2050?

Elaboración propia. José M. Rodríguez-Pardo






La representación gráfica de la curva de  la supervivencia humana está adoptando  una forma que se denomina como de "rectángulo", es decir la tasa de supervivencia es prácticamente constante hasta llegar a una edad donde la mortalidad se concentra en torno a una edad modal.

En el caso español la última estadística del INE nos dice que en caso de las mujeres la edad más común de fallecimiento es la correspondiente a los 88 años de edad, con una desviación típica sobre esta edad es de cuatro años

Es cierto que la curva de supervivencia está adoptando la citada tendencia de rectangularización como se puede verificar en el segundo cuadro, Ahora bien, proyectar la curva más allá de mitad de siglo además de ser una tarea  difícil, está rodeada de incertidumbres. 

Nos interesa más que conocer las tasas de supervivencia de cada edad , la forma visual que puede adoptar la curva,

Para logar este propósito hay que realizar varias hipótesis.

- Proyectamos hasta 2020 la tasa de supervivencia de las mujeres españolas con métodos actuariales tomando como base los datos del INE con una serie histórica desde 1960.Proyecciones estadísticas a más largo plazo pueden ser difíciles de medir y evaluar.

- Las mejoras calculadas a 2020 las mantenemos constante hasta 2050. Aquí entramos en un ejercicio de imaginación, pero la hipótesis nos sirve para nuestro propósito. 

- Para las edades extremas tomamos como referencia la experiencia mundial de supercentenarios en mortalidad y las teorías de la cinética de la mortalidad

Todo lo anterior nos lleva a concluir que hasta los 65 años es constante y cercana a uno.

La edad modal de fallecimiento superará los 95 años de edad, superior a los 88 de la actualidad,esta hipotesís no es muy fuerte pues de hecho las mujeres japonesas ya han alcanzado los 92 años de edad

La mortalidad de edades extremas al ser constante hace que para un millón de personas que nacen 1 persona alcanzará los 140 años de edad, si bien es cierto que la curva nos muestra una forma casí asintótica con respecto a la edad llegando a ser cero ( con una precisión de 10 decimales) a los 165 años de edad. 

Lo más relevante, es que más que una forma rectangular, al observarse una cola hacia la derecha de supervivientes centenarios, tal vez la forma de la curva de la mortalidad humana tienda hacia una Función sigmoide.Si en el primer y último decil de supervivencia se extiende por un periodo de unos 30 años no ocurre lo mismo con los siguientes deciles acumulados.

Este tipo de curvas sigmoides que se observan en procesos de aprendizajes, guardan relación con las teorías de la fragilidad que también son aplicables a seres vivos y que se han observado en distintos animales. Es decir si eliminamos las causas de fallecimiento accidental y nos remitimos a la evolución de los fallecimientos por causas de desgaste biológico, vemos que el hombre puede llegar a vivir hasta edades que se relacionan con el límite medio biológico y a partir de esas edades los que superen esos tramos pueden tener una vida muy prolongada. Por lo tanto la representación de la supervivencia humana tomada desde la demografía tiende a comportarse con la observación de la supervivencia humana desde la evolución biológica natural.

Para llegar a adoptar una forma sigmoide precisa, donde la tasa de mortalidad/supervivencia de 0,5 se alcanzaría a la edad de 95 años o incluso superior, es necesario que se extienda el límite de la vida de manera muy considerable, para lo cual la tasa de mortalidad de las personas supercentenarias no deberían superar el 25% anual, donde la supervivencia "cero" con 10 decimales se alcanzaría pasados los 180 años de edad y con una tasa de 20% alcanzaría los 190 años de edad límite.  Para que se cumpla esta situación tenemos que reafirmar dos supuestos, uno que la tasa de mortalidad en personas muy mayores es constante y que esta no sea superior a ese 25%-20%, cifra inferior a las hipótesis que se manejan en la actualidad del 30-35 %.


En la actualidad es más factible que se cumpla el efecto meseta en la parte "joven" de la tabla, que la meseta inversa en la parte " centenaria" de la tabla, pero estamos haciendo hipótesis a muy largo plazo y es verdad que algunos expertos en biomedicina creen que pronto se podrán rebasar los 130 años edad, llegando en algunas estimaciones a los 150 años,, este escenario especulativo es ambicioso teniendo en cuenta que las proyecciones demográficas más recientes, tomadas eso sí datos del pasado, sitúan la máxima supervivencia en mujeres en los 117 años.

Veamos por último la representación gráfica de una función sigmoide, tomada de Wilkipedia, en este caso representaría las tasas de fallecimiento.


Reiteramos que el ejercicio de imaginación consiste en entender la forma de la supervivencia humana.

José Miguel Rodríguez-Pardo.

















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viernes, 1 de agosto de 2014

Hacia el nuevo paradigma de la medida de la supervivencia humana


En la siguiente dirección web se puede descargar el trabajo que he escrito en la revista Gerencia de Riesgos  y Seguros publicado el 1 de agosto de 2014 por la Fundación Mapfre


1http://www.mapfre.com/fundacion/html/revistas/gerencia/n119/es/estudio1.html




José Miguel Rodríguez-Pardo.