martes, 30 de octubre de 2012

viernes, 26 de octubre de 2012

Modelo de Longevidad por medio de Redes Neuronales Artificiales.Longevity Model using Artificial Neural Networks

El pasado 25 de octubre correspondiendo con el acto de lectura de Tesis Fin de Máster en la Universidad Carlos III de Madrid en el Mastér en Ciencias Actuariales y Financieras se defendió la tesis Modelo de Longevidad por medio de Redes Neuronales Artificiales Longevity Model using Artificial Neural Networks cuyo autor es Daniel Sánchez del Álamo Benguigui y que he tenido la oportunidad de dirigir este trabajo de investigación. Por su especial relevancia y carácter innovador en la ciencia actuarial aplicada al riesgo de longevidad,reproduzco el resumen de dicha tesis. José Miguel Rodríguez-Pardo. ----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------- Modelo de Longevidad por medio de Redes Neuronales Artificiales Daniel Sánchez del Álamo Benguigui Resumen Las redes neuronales artificiales orientadas al contexto actuarial han sufrido un aislamiento académico, principalmente debido, a la formación estadística que reciben los actuarios. Bajo este reto de incorporar las redes neuronales al mundo actuarial, este documento plantea el objetivo de predecir la longevidad futura de las personas para cuantificar de forma precisa el riesgo derivado en la longevidad, en contraposición a otras técnicas de regresión clásicas como los modelos lineales generalizados (GLM). Se presenta, por tanto, en el siguiente documento, una alternativa eficiente para realizar dichos cálculos argumentando desde un punto de vista técnico, el nacimiento de las redes neuronales artificiales como rama de la Inteligencia Artificial y del Aprendizaje Automático. Se han realizado diversos estudios con estructuras distintas de redes encontrando un modelo de predicción acorde al umbral de error objetivo. Palabras clave: red neuronal artificial, red de base radial, algoritmo supervisado, inteligencia artificial, aprendizaje automático, célula de McCulloch-Pitts, longevidad, riesgo, seguros, predicción, modelo, modelo de riesgo, neurona, Matlab, perceptrón Abstract Artificial neural networks oriented actuarial context have suffered academic isolation, mainly due to statistical training received by actuaries. Under the challenge of incorporating neural networks to actuarial world, this paper discusses the goal of predicting future longevity of individuals to accurately quantify the risk from longevity, as opposed to other classical regression techniques like Generalized Linear Models (GLM). It has, therefore, in the following document, an efficient alternative to perform such calculations arguing from a technical standpoint, the birth of artificial neural networks as a branch of Artificial Intelligence and Machine Learning. There have been several studies with different network structures finding a model predicting skills according to target error threshold. Keywords: artificial neural network, radial base neural network, supervised algorithm, artificial intelligence, matching learning, McCulloch-Pitts cell, longevity, risk, insurance, assurance, prediction, model, risk model, neuron, Matlab, perceptron

Sobreexpresión genética en centenarios.

El estudio dirigido por José Viña,es muy relevante de cara a conocer la singularidad de las personas centenarias y que la relaciona con la teoría de la fragilidad. Los modelos actuariales mas avanzados ya modelizan el riesog de longevidad en personas centenarias. En definitiva,el estudio viene a corroborar esta linea de investigación actuarial. Reproduzco la noticia aparecida en prensa en esto días en este caso en ABC. José Miguel Rodríguez-Pardo. ........................................................................................................................................ 25-10-2012 / EFE Las personas centenarias además de alcanzar una "longevidad extrema" muestran bajos niveles de fragilidad, algo que puede ser atribuible a que en ellos, al igual que en las personas jóvenes, hay una "sobreexpresión" de genes reguladores implicados en el envejecimiento. Así lo ha asegurado hoy a EFE José Viña, catedrático del Departamento de Fisiología de la Universitat de València, que junto al servicio de Geriatría del Hospital de la Ribera, en Alzira (Valencia), que dirige Juan Antonio Avellana, ha realizado un estudio sobre los genes implicados en la salud, la calidad y la extensión de la vida. José Viña ha presentado hoy los resultados de este estudio en el primer Simposio Mediterráneo: Nutrición, Dietética e Innovación, que se ha celebrado en el Colegio de Médicos de Valencia y en el que han participado más de un centenar de profesionales de la salud. En el estudio, que se inició hace tres años, han participado 33 personas centenarias (entre 98 y 102 años), 70 octogenarios (80-85 años) y otras 70 personas jóvenes, todas residentes en el área de Alzira. Han estudiado en estas personas el conjunto de genes reguladores de las defensas y la inmunidad con el objetivo de buscar aquellos genes de longevidad que pudieran estar "sobreexpresados" en centenarios ya que éstos, no solo alcanzan una longevidad extrema, sino que además muestran unos destacables bajos niveles de fragilidad. José Viña ha explicado a EFE que del conjunto de genes reguladores se han encontrado cuatro que están "sobreexpresados" y podrían estar "asociados a la longevidad". "Se ha encontrado un conjunto de genes reguladores que podrían ser una marca de la centenariedad", ha afirmado Viña, quien ha indicado que las personas centenarias "están mucho mejor dotadas desde el punto de vista genético que las octogenarias. Tienen una vida saludable que se aproxima a la vida total". Una de las conclusiones del estudio es que el análisis de componentes principales de los genes de los centenarios tiene "destacables similitudes" con el de personas jóvenes, mientras que "difiere considerablemente" del de los octogenarios. Además, se ha podido determinar que los centenarios tienen aumentada la expresión de algunos de los genes reguladores si se comprara con su regulación en personas jóvenes, mientras que los octogenarios la tienen disminuida. Según José Viña, recientemente se ha observado que en humanos el estrés oxidativo está asociado más que a la edad, a una mayor fragilidad. A su juicio, una "interesante aproximación" sería encontrar intervenciones fisiológicas, nutricionales o farmacológicas para promover la actividad de estos genes asociados a la longevidad y ha destacado la importancia del ejercicio físico para promover dichos genes. http://www.abc.es/agencias/noticia.asp

Lectura Tesis Fin de Master de la Segunda Promoción del Master en Ciencias Actuariales y Financieras Universidad Carlos III de Madrid.

El 25 de octubre se celebró el acto de lectura de las Tesis Fin de Master de la segunda promoción del Master en Ciencias Actuariales y Financieras de la Universidad Carlos III de Madrid. El tribunal presidido por la profesora Dra Irene Albarran estuvo integrado por Ricardo Lozano,José Gabriel Puche y Juan Miguel Monjo, valoró muy positivamente el nivel de los trabajos y la claridad expositiva de los alumnos. El profesor Dr Jesús Simón y yo mismo como directores de la asignatura de Tesis Fin de Master felicitamos a los alumnos por el trabajo realizado y su incorporación a la profesión actuarial. A continuación reproduzco el título de cada una de las tesis presentadas:

miércoles, 24 de octubre de 2012

Entropía de las tablas de longevidad.

En el bolg "http://wwwlonglive.blogspot.com.es" ,se pueden leer artículos de mucho interés acerca de la longevidad,.Reproduzco el artículo titulado "Teorías de la longevidad", que habla de la entropía de las tablas de vida,elemento de reflexión a considerar para evaluar las mejoras de la esperanza de vida. José Miguel Rodríguez-Pardo --------------------------------------------------------------------------------------- El estudio de la longevidad es una de las principales materias del mundo científico. Los avances en medicina y en salud pública durante el siglo XX han logrado un aumento significativo de la esperanza de vida en países desarrollados. Sin embargo, parece que se ha tocado techo pese a que recientemente se han producido nuevos avances en el desarrollo de teorías moleculares. Las implicaciones de un mundo envejecido afectan el estatus sanitario de miles de millones de personas, la integridad financiera de los programas de seguridad social y la economía de las naciones. La mortalidad y el envejecimiento van parejos, pero hay diferencias importantes en sus dinámicas biológicas y estadísticas. Los individuos tienen un horizonte de vida definida por la edad del fallecimiento; el miembro más viejo de una especie define la vida máxima de la especie. Para las poblaciones, los demógrafos calculan la expectativa de vida sobre la base de tablas de vida. En poblaciones heterogéneas, como las humanas, la vida máxima de la especie es siempre, por definición, mayor que la expectativa de vida. En 1990, algunos autores demostraron empíricamente que según incrementa la expectativa de vida al nacer, tal índice se va haciendo menos sensible a posibles cambios en la tasa de mortalidad. Este fenómeno se denominó entropía de las tablas de vida. A partir de principios demográficos se concluyó que es muy difícil que la expectativa de vida al nacer supere los 85 años; ello al menos que los científicos descubran cómo modificar el proceso de envejecer en un porcentaje sustancial de la población. Para superar una expectativa de vida más allá de los 100 años, habría que suprimir toda mortalidad por debajo de los 85 años. Dado que ello es completamente irreal, los estudios más sensatos hacen sus previsiones para expectativas no superiores a los cien años. La expectativa de vida al nacer ha mostrado un crecimiento mantenido en las poblaciones con baja mortalidad perinatal; ello desde el año 1985 a 1995. Para superar los 85 años de expectativa de vida se requieren, sin embargo, drásticas reducciones de las tasas de mortalidad total en mujeres y en hombres; por ejemplo, las tasas de mortalidad de 1995 deberían reducirse en más del 50 por ciento en todos los grupos de edad a efectos de alcanzar los 85 años en EE.UU. (expectativas de vida en 1995: 79.0 años mujeres, 72.4 años hombres). Incluso entre el grupo más longevo (mujeres japonesas), las tasas de mortalidad en cada grupo de edad deberían reducirse el 20% para conseguir un incremento de 2 años en los 83 actuales. De acuerdo con los cálculos referidos, se requiere una reducción del 85% en las tasas actuales de mortalidad para que las japonesas alcancen los 100 años de expectativa de vida. Para ilustrar el fenómeno de entropía citado, puede considerarse que cuando la expectativa de vida al nacimiento es de 50 años, se estima un 4.1% de reducción en la tasa global de mortalidad para aumentar 1 año la expectativa de vida; un escenario similar al experimentado por las mujeres francesas a principios del siglo XX. Por el contrario, para incrementar la expectativa de vida desde 80 años a 81 años se requiere una reducción del 9.1% en la tasa global de mortalidad. Alcanzar una expectativa de vida de 100 años o más a través, exclusivamente, de cambios en los estilos de vida es hoy tan ilusorio como hace diez años. ¿Es el envejecimiento el acto final del libreto de la biología del desarrollo? Los cambios característicos del envejecimiento parecen corresponder a un programa más del desarrollo. El envejecimiento se define de acuerdo con dos criterios. Primero, la probabilidad de morir en un momento dado incrementa con la edad del organismo. Esta definición estadística se aplica desde las levaduras a los mamíferos y refleja la naturaleza progresiva del proceso. Segundo, los cambios característicos en el fenotipo ocurren en todos los individuos. La definición fenotípica es igualmente general y distingue el proceso de envejecer como tal, de las enfermedades características del envejecimiento como el cáncer o las coronariopatías. Los fenotipos “viejos” afectan a todos los individuos de una población, mientras que las enfermedades del viejo afectan sólo a algunos de ellos. Fenotipo y patología impactan en la expectativa de vida, pero de manera diferente. Por ejemplo, los avances en medicina y en salud pública durante el siglo XX han logrado un incremento significativo en la expectativa de vida en los países desarrollados que, sin embargo, casi ha tocado techo. Por otro lado, dado que tales avances no han incidido sobre el proceso mismo de envejecer; no ha habido cambios sustanciales en la longevidad de la especie humana. Varias estrategias de estudio del envejecimiento han proporcionado los puntos de partida para comprender los mecanismos básicos subyacentes. Una de las primeras teorías propuso que las especies reactivas del oxígeno generadas por el metabolismo causan un daño acumulativo a lo largo de la vida. Por su parte, diferentes clases de inestabilidad genómica han ganado protagonismo: acumulación de mutaciones puntuales, pérdida de secuencias iterativas de ADN que afectan, especialmente, al ADN ribosómico y al ADN mitocondrial, o reorganizaciones y cambios en el número cromosómico, se han propuesto como causas de envejecimiento. Sin embargo, la baja frecuencia de estos cambios genómicos, incluso en individuos viejos, arroja dudas sobre su importancia en el proceso de envejecimiento fisiológico; no así en los síndromes progeroides (envejecimiento precoz). Especial interés tienen los telómeros, las secuencias iterativas que conforman los extremos de los cromosomas y que son incapaces de replicarse con ayuda de las ADN polimerasas. Por ello, se acortan con cada división celular a menos que se mantengan por la intervención de la telomerasa que añade secuencias repetidas teloméricas a los extremos cromosómicos. Se ha señalado que el acortamiento telomérico pudiera ser un reloj molecular que marque el cese del potencial mitótico celular o senescencia replicativa característica del envejecimiento celular. En este caso, una actividad telomerasa mantenida aseguraría la jovialidad y capacidad replicativa celular. Sin embargo, una serie de indicadores cuestiona que el acortamiento de los telómeros cause envejecimiento. Entre otros, un estudio reciente indica que, en humanos, no hay correlación significativa entre la edad del donante y la capacidad replicativa de fibroblastos en cultivo. La existencia de programas genéticos, la muerte celular programada o la participación de un control sistémico del envejecimiento, son otras tres estrategias para abordar el problema. En cualquier caso, los recientes avances en el estudio del envejecimiento indican que este proceso es susceptible de análisis molecular y que, incluso, puede ser relativamente simple; algunos modelos animales señalan que el proceso de envejecimiento depende de unos pocos procesos de control. En el plano de la fisiología, roedores sometidos a restricción calórica viven el doble que los controles; en el genético, diversos polimorfismos genéticos se relacionan con longevidad. Si sólo unos pocos procesos claves son críticos en el envejecimiento humano, puede haber dianas moleculares específicas con posibilidad de intervención farmacológica. Pudiera pensarse en lentecer o detener el proceso de vejez en uno o más sistemas orgánicos. El hecho de que células somáticas adultas se hayan utilizado para clonar animales sugiere que los cambios nucleares relacionados con el envejecimiento pueden ser reversibles. ¿Es pensable intervenir en el envejecimiento humano? Durante los dos últimos siglos, la expectativa de vida humana se dobló en los países en desarrollo. Asumiendo que las futuras intervenciones no afectaran las causas de mortalidad independientes del proceso de envejecimiento, la expectativa de vida media se vería afectada, pero en menor grado de lo que sucedió en los últimos dos siglos. Así, una expectativa de vida al nacer de 85 años se conseguiría en Francia, para los dos sexos, el año 2033; en Japón en 2035, y en EE.UU., en 2182. Para alcanzar una expectativa de vida de 100 años, deben morir todos los que hoy están vivos. La expectativa de 100 años se sitúa, en Japón, hacia el año 2150, y en EE.UU. hacia el 2520. A pesar de los importantes avances realizados durante los últimos años, se desconocen los mecanismos responsables del envejecimiento celular y, por lo tanto, las dianas que permitirían realizar un diseño racional de fármacos con capacidad para modificarlo. Tampoco se dispone de ensayos clínicos controlados que avalen la utilización de fármacos y/o suplementos dietéticos. A pesar de ello, en los últimos años se constata que nuestra sociedad ha caído en una mentalidad “farmacocéntrica” que ha olvidado que el mejor camino para prevenir el proceso del envejecimiento son las medidas de prevención primaria, tales como evitar los hábitos nocivos y estimular los saludables. El aumento progresivo de las esperanzas de vida en los países desarrollados hará cada vez más difícil poder demostrar que los fármacos pueden retrasar el envejecimiento. Por ello, el objetivo del tratamiento contra el envejecimiento debería ser la prevención del deterioro de las funciones vitales. Pedro García Barreno

martes, 23 de octubre de 2012

Intervención en "Todos Seguros", ABC.Punto Radio

José Miguel Rodríguez Pardo, doctor en Economía y doctor en Biomedicina, profesor de la Universidad Carlos III de Madrid (C3M) y exdirector general de BBVA SEGUROS, acude hoy invitado al programa 'Todos Seguros’ de ABC Punto Radio. Con él se tratarán aspectos relacionados con la biomedicina, el envejecimiento de la población y factores que influyen en la longevidad, así como los cambios que se perfilan en los sistemas de tarificación de los seguros de Vida. ‘Todos Seguros’ está producido, presentado y dirigido por Miguel Benito, periodista y consejero editorial de INESE, la División de Seguros de Reed Business Information. Se emite en directo en unas 50 emisoras de ABC Punto Radio los martes entre las 19:30 y las 20:00 horas. Los jueves y los viernes entre las 19:00 horas y las 20:00 horas también se emiten sendos suplementos con una duración conjunta de unos 15 minutos.

domingo, 21 de octubre de 2012

Los sistemas inmunitario y nervioso determinan la longevidad de una persona

La longevidad de una persona puede estar asociada en gran medida al estado del sistema inmunitario y el sistema nervioso así lo demuestran los estudio de los estudios de Mónica de la Fuente, catedrática de Fisiología de la Universidad Complutense de Madrid. Diversos biomarcadores del sistema inmunitario pueden predecir la longevidad y revelar la edad biológica, que nada tiene que ver con la edad cronológica (la que marca el calendario y tu fecha de nacimiento). La edad biológica viene a determinar la velocidad con la que envejecemos y la cronológica el tiempo que llevamos vivos. F:http://evidasana.com/blog

Predictive Ability Of Family History And SNP-Based Methods Best Used In Combination To Provide Valuable Evidence In A Differential Diagnosis

In a new theoretical study, 23andMe, the leading personal genetics company, developed a mathematical model that shows family history and genetic tests offer different strengths. The study results suggest that both family history and genetics are best used in combination to improve disease risk prediction. The full results of the study have now been published online in the journal PLOS Genetics. Family history is most useful in assessing risks for highly common, heritable conditions such as coronary artery disease. However, for diseases with moderate or low frequency, such as Crohn's disease, family history accounts for less than four percent of disease heritability and is substantially less predictive than genetic factors in the overall population. The study results indicate single nucleotide polymorphism (SNP)-based genetic tests can reveal extreme likelihood ratios for a relatively large percentage of individuals, thus providing potentially valuable evidence in differential diagnoses. "Both family history and genetics are important tools for assessing an individual's risk for disease," 23andMe CEO and co-founder Anne Wojcicki said. "We believe it will become increasingly important for individuals and physicians to know both family history and genetic profile to provide optimal healthcare." Lead author and 23andMe scientist Chuong Do, Ph.D, worked with 23andMe senior medical director Uta Francke, M.D., and principal scientists David Hinds, Ph.D., and Nicholas Eriksson Ph.D. to make a comprehensive comparison of family health histories and genetic testing to assess risk for 23 different conditions. These conditions included coronary artery and heart diseases, type 1 and 2 diabetes, prostate cancer, Alzheimer's disease, breast cancer, lung cancer, Crohn's and celiac disease, ovarian cancer, melanoma, bipolar disease and schizophrenia among others. The analysis confirms that family history is most useful for highly common, heritable conditions and for single-gene (Mendelian) disorders with high penetrance, where the specific genetic cause is not yet known. For relatively common diseases that may have many contributing genetic and environmental factors, such as coronary artery disease, knowing that your father had the disease is helpful at predicting whether or not you might be at risk for the same condition. For less common diseases involving many weak genetic, such as Crohn's disease, knowing family history seldom helps in making a risk prediction, in part, because these diseases are uncommon enough that they would rarely show up in the immediate family health history. When family histories are uninformative, genetic testing may still reveal the genetic variants that would put an individual at a higher or lower risk for the condition. For example, Crohn's disease might not show up in a family history, but the risk prediction from a genetic test can be relatively more informative. "These results indicate that for a broad range of diseases, already identified SNP associations may be better predictors of risk than their family history-based counterparts, despite the large fraction of missing heritability that remains to be explained," stated lead researcher Chuong Do, Ph.D. "They also suggest that in some cases, individuals may benefit from supplementing their family medical history with genetic data, in particular, as genetic tests are improving and more risk factors are discovered." "This study addresses the false division between these two diagnostic tools, genetic testing versus family health histories, where the approaches have traditionally been portrayed as competing alternatives," explained Uta Francke, M.D., senior medical director. "Physicians rely on a variety of tools such as a stethoscope or a thermometer - both are useful in their own way. Similarly, family health histories and genetics both offer different but equally valuable information to inform patient care." "Using genetic testing or SNP-association based methods to estimate risk for some rare complex diseases is as good as family histories can be at estimating risk for common heritable conditions," Dr. Francke continued, "and for individuals who don't have access to their family health history, genetic testing can alert them to risks they wouldn't be aware of otherwise." The authors use their theoretical model to demonstrate the limits of predictive testing while also outlining specific areas where genetic tests have the potential to be medically useful. These results, which provide a cautiously optimistic outlook on the future of genetic testing, contrast with the conclusions reached in an independent study published earlier this year in Science Translational Medicine. This investigation follows a number of previously published studies that utilized the company's customer database in identifying new genetic associations for a variety of health conditions, including the discovery of two novel genetic associations for Parkinson's disease, published in PLOS Genetics; five novel significant genetic associations for hypothyroidism in the largest known genome-wide association study of hypothyroidism conducted to date published online in the journal PLOS ONE; six novel associations for male pattern baldness and their unexpected association with common diseases including prostate cancer and Parkinson's disease also published in PLOS Genetics; and seven novel associations for breast size, published in BMC Medical Genetics, three of which are also associated with breast cancer. Ref http://www.medicalnewstoday.com/releases/251557.php MLA n.p. "Predictive Ability Of Family History And SNP-Based Methods Best Used In Combination To Provide Valuable Evidence In A Differential Diagnosis." Medical News Today. MediLexicon, Intl., 17 Oct. 2012. Web. 21 Oct. 2012.

Ramajit Rhagav padre a los 96 años de edad.

El hombre explicó cuál es el secreto de su longevidad y fuerza: no beber ni gota de alcohol y ser vegetariano. Ramajit Rhagav, un indio de 96 años del estado de Haryana, se ha convertido en el padre más viejo del mundo después de que su mujer, de 52 años, diera a luz a su segundo hijo el pasado 5 de octubre, según informa "Times of India" Rhagav, que ya había batido el récord en 2010, ha comunicado además que su mujer se encuentra en perfecto estado, al igual que el pequeño. Además, el indio ha explicado cuál es el secreto de su longevidad y fuerza: no beber ni gota de alcohol y ser vegetariano. A su vez, también ha afirmado que para vivir tantos y tener su fuerza es necesario levantarse muy pronto por las mañanas (a las 5), acostarse antes de las 8 de la noche, trabajar durante el día y dormir una buena siesta reparadora por la tarde. Fuente:http://www.nuevodiarioweb.com.ar

Estimación de la población mundial en 2050.

Interesante artículo publicado en fuente:http://www.bbc.co.uk/mundo/noticias/2012/10/121014_poblacion_futuro_habitantes_dp.shtml donde se detalla que una de las mayores dificultades de las estimaciones de proyecciones poblaciones es debida a la estimación de las mejoras de mortalidad de la población de edades avanzadas. José Miguel Rodríguez-Pardo -------------------------------------------------------------------------------------------------------------- El Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA, por sus siglas en inglés) publicó recientemente un informe que describe el envejecimiento de la población mundial. "Hoy tenemos una de cada nueve personas con 60 años o más", dice Ann Pawliczko, del UNFPA, "pero para el año 2050 será uno de cada cinco, y para ese entonces habrá más personas mayores que menores de 15 años". La ONU ve estas estadísticas como un motivo de celebración, porque más personas están viviendo más tiempo, y uno de preocupación, porque el cambio presenta un desafío económico y social. Pawliczko dice no hay duda de que está sucediendo. "Podemos estar muy seguros de los números para 2050, porque las personas que van a tener 60 años de edad en 2050 ya nacieron. Esto no es especulación". Pero la ecuación tiene otra cara: la tasa de natalidad. Y predecir cómo ésta va a cambiar es más difícil. Es por esta disyuntiva entre la natalidad y el envejecimiento que resulta sumamente complicado saber cuántas personas habrá sobre la Tierra dentro de cientos o miles de años. Pero, ¿hasta qué punto podemos saberlo? Transición demográfica Durante mucho tiempo, los especialistas en estadística han visto en los números una "transición demográfica" que sucede cuando una sociedad se vuelve más rica. Hace más de una década que China se convirtió en nación "anciana" y su proceso de envejecimiento se ha acelerado. "La transición demográfica es el cambio de los niveles de natalidad y mortalidad de la población, que va de niveles altos a bajos. Esto por lo general es el resultado del desarrollo económico y social", dice Pawliczko. "Por lo general se habla de cuatro etapas. La primera es cuando las tasas de natalidad y mortalidad son altas. Luego tenemos una segunda etapa de altas tasas de natalidad y disminución de las tasas de mortalidad. "En la tercera etapa vemos la disminución de las tasas de natalidad y niveles de mortalidad relativamente bajos; esta etapa se caracteriza por la baja tasa de crecimiento de la población, con lo que la población se nivela. La cuarta etapa es cuando se tienen bajas tasas de natalidad y mortalidad, y en consecuencia un bajo crecimiento demográfico". De modo que mientras los países se enriquecen, sus tasas de fertilidad caen. Pero, ¿qué pasa después? La fertilidad en países desarollados Muchos especialistas asumen que las naciones avanzadas se mantendrán en periodos de bajo crecimiento demográfico. Pero la última evidencia sugiere que pueden estar equivocados. "Históricamente, la fecundidad ha disminuido en toda Europa", dice Jane Falkingham, director del Centro para el Cambio de Población de la Universidad de Southampton. "Pero si se ves en el período más reciente, en los últimos 10 años, más o menos, hay aumentos en la fertilidad en los países más avanzados". El demógrafo de la Universidad de Oxford Francesco Billari dice que este aumento de la natalidad en los países desarrollados no puede atribuirse únicamente a la inmigración, que es lo que algunos han asumido. "Hemos hecho algunos cálculos", dice, "y el nuevo cambio no sólo se debe a la inmigración. También los nativos están cambiando. "Los demógrafos solíamos pensar que era fácil prever los cambios en la población. Creo que no es así. Ya no podemos preverlo a nivel mundial, porque las recientes tendencias de fecundidad están demostrando que el futuro es mucho más incierto de lo que pensábamos. Puede haber un cambio completo en la clasificación de los niveles de fecundidad en el mundo". ¿Qué diferencia puede hacer para las proyecciones globales de la población el aumento recientemente observado de la fecundidad en algunos países desarrollados? Utilizar un reproductor alternativo Pawlizcko dice que no espera que sea muy significativa. Pero, aunque puede tener razón, ni ella ni nadie puede estar demasiado seguro. Los especialistas tienen un largo historial de no prever importantes cambios demográficos. "Consistentemente hemos hecho proyecciones de población equivocadas en los últimos 50 años", dice el profesor Falkingham. "Y esto es en parte porque hemos subestimado las mejoras en la mortalidad, particularmente la mortalidad en edades avanzadas, pero tampoco hemos podido detectar las tendencias de la fecundidad". ¿Muchos o pocos? Un día sabremos si nuestras proyecciones de población después de 2050 son exactas, si la denominada "transición demográfica" entra en una quinta e inesperada etapa de mayor fecundidad, o si los grandes saltos de la esperanza de vida cambian el panorama por completo, como ocurrió en el pasado. Pero pronosticar la población siempre será una ciencia altamente incierta. En 2004 el Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas trató de adivinar lo que la población mundial podría ser en 2300. Dijo que la población se estabilizaría en alrededor de 9.000 millones en 2050 y que luego se mantendría en ese nivel por un tiempo. Pero ese fue su cálculo de la media. Su estimación alta era de 36.400 millones y su estimación baja, de apenas 2.300 millones. En otras palabras, cuando se mira más allá de las generaciones actuales, cualquier cosa puede pasar.

sábado, 20 de octubre de 2012

La velocidad a la que envejecemos determina cuánto viviremos.

Reproduzco de manera combinada sendos artículos de José Antonio Lozano Teruel y Omar Rangel que se han publicado recientemente acerca de la medida de la velocidad de envejecimiento. Los avances en la biomedicina en relación con la medida de longevidad nos situan en una frontera de conocimiento bioatuarial y proponen nuevas medidas de esperanza de vida del ser humano que con toda seguridad sustituirán a la edad cronológica. José Miguel Rodríguez-Pardo. ----------------------------------------------------------------------------------------- El pasado 27 de septiembre la revista Cell Report publicaba una investigación dirigida por la investigadora alicantina María Blasco, actual directora del CNIO (Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas) en la que, por primera vez, se establecía la existencia en mamíferos de un parámetro indicador de la velocidad de su envejecimiento y de su longevidad, marcador relacionado con la longitud de sus telómeros. Las revistas científicas mundiales más importantes han destacado el acontecimiento, que también se ha recogido en los medios de comunicación de todo el mundo. El deseo de los humanos de vivir más y mejor hace que las investigaciones sobre el envejecimiento y todas las circunstancias que lo rodean sea actualmente uno de los campos científicos más activos. En los bancos de datos que cubren las revistas internacionales de calidad podemos encontrar más de un millón de publicaciones al respecto y el incremento de interés se refleja en el número de ellas, medidas en periodos de 25 años; años 1900-1925: 1150 publicaciones, años 1926-1950: 3170, años 1951-1975: 22.700, años 1976-2000: 360.000, años 2001-2012: 450.000. Hoy ya no tienen sentido las antiguas discusiones sobre las causas del envejecimiento, porque sabemos que, al igual que la mayoría de los procesos biológicos que conforman nuestro fenotipo, en el mismo intervienen simultáneamente factores genéticos, condicionamientos ambientales y hábitos de vida. Más aún, estos factores no son independientes. Los avances de los conocimientos en Epigenética han demostrado la íntima interacción existente entre ellos. El caso del sistema telómeros / telomerasa es un claro ejemplo de ello. Los telómeros (del griego telos, "final" y meros, "parte") son regiones de ADN no codificante, altamente repetitivas, características de los seres eucariotas, que se sitúan en los extremos de los cromosomas lineales, funcionando como una especie de capuchones protectores del material genético. Están implicados en aspectos biológicos tan importantes como la estabilidad de los cromosomas, la división celular, el tiempo de vida celular y la malignización. Fueron descubiertos, durante la década de los años 30, por Hermann Joseph Muller, Nobel del año 1946, no por ello, sino «por sus estudios acerca de la acción de los rayos X como productores de mutaciones y de la acción de las radiaciones sobre células».[ Desde entonces, se ha avanzado mucho en el conocimiento de los telómeros, y en el año 2009 Elizabeth H. Blackburn, Carol W. Greider y Jack W. Szostak obtuvieron el Premio Nobel de Medicina por sus descubrimientos sobre tales telómeros y la enzima telomerasa, que permite su alargamiento, su no degradación y, con ello, la conservación de la juventud celular. La telomerasa está presente sobre todo en células de la línea germinal, en tejidos fetales y en ciertas células madre poco diferenciadas. La relación del acortamiento de los telómeros con el envejecimiento celular quedó claramente establecida tras una investigación publicada en 1990 en la revista Nature por un grupo de investigadores del Cold Spring Harbor Laboratory, de Estados Unidos. Las células a lo largo de su vida se dividen, envejecen, y en el transcurso del proceso la longitud de sus telómeros se acorta. El equipo de Blasco ha realizado estudios longitudinales en ratones, siguiendo a individuos concretos a lo largo de tiempo, midiendo la longitud de sus telómeros. Para ello, recogieron muestras periódicas de células sanguíneas de cada individuo, comprobando que los ratones que conseguían vivir más tiempo no eran los que tenían telómeros más largos a una edad determinada, sino aquellos en los que la velocidad de su acortamiento telomérico era menor. Elsa Vera, una de las autoras ha declarado que ´Lo que importa no es tanto tener los telómeros largos en un momento dado, sino la tendencia o evolución en su longitud a lo largo del tiempo´. Los ratones que acumularon más telómeros cortos (aberrantes) vivieron de media unas 105 semanas, mientras que los que presentaron una menor acumulación vivían una media de 140 semanas (un 33% más). En orden a una extrapolación en humanos, hay que tener en cuenta que la velocidad de acortamiento de los telómeros en ratones es unas 100 veces superior a la de los humanos y que, aproximadamente, un ratón de 600 días (unas 86 semanas) equivale en términos de duración de vida a un humano de 60 años. FUTURO Todo indica que, con ello, los científicos disponen por vez primera de una herramienta que puede permitir medir no sólo el estado de envejecimiento, sino también de un indicador general de salud y supervivencia e, incluso, de salud cognitiva y de longevidad. Por otra parte, como la velocidad de acortamiento de los telómeros, que determina la del envejecimiento se afecta por los diversos factores ambientales o de hábitos de vida, ello permitirá en el futuro estudiar en cada caso el papel de tales factores en la determinación de cuánto tiempo y en qué estado de salud podemos llegar a vivir. Y, en esta vía de posibilidades el propio equipo de la Dra. Blasco, en la revista EMBO Molecular Medicine, publicaba recientemente otra investigación (`Telomerase gene therapy in adult and old mice delays aging and increases longevity without increasing cancer´) relatando su éxito mediante terapia génica logrando introducir, con una técnica novedosa, el gen de la telomerasa tanto en ratones adultos como en viejos, consiguiendo retrasar su envejecimiento e incrementar su longevidad sin que aumentase el peligro de sufrir cánceres, que es la amenaza mayor que hasta ahora han tenido todos los intentos de aumentar la actividad telomerasa. Dado que la longitud del telómero es un indicador clave del envejecimiento celular y su viabilidad, se ha convertido en un marcador pronóstico de riesgo de enfermedad, progresión y mortalidad prematura en los seres humanos. El acortamiento de los telómeros es predictivo de envejecimiento acelerado y precursor de la iniciación de muchos tipos de cáncer como: vejiga, cabeza, cuello, pulmón y riñón; y disminución de la supervivencia en pacientes con enfermedad coronaria y enfermedades infecciosas. Asimismo, la disminución de la actividad telomerasa por sí sola fue vinculada a un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular, independientemente de la edad cronológica. La telomerasa también se afecta por la obesidad y la resistencia a la insulina, y deriva en una disminución de la longitud de los telómeros. Por lo tanto, la actividad telomerasa puede ofrecer un factor pronóstico de la estabilidad genómica y la viabilidad celular a largo plazo. Como vemos, las investigaciones acerca del tamaño de los telómeros, la enzima telomerasa y sus moduladores bioquímicos son actualmente las últimas innovaciones en genética y envejecimiento; seguramente protagonizarán muchas noticias científicas en los próximos años. Un área de investigación que tratándose del envejecimiento, podemos considerar que todavía está en pañales. F:http://cienciaysalud.laverdad.es http://www.epicentrodemexico.com.mx

Mejora de la mortalidad humana en su contexto evolutivo.

Cada curva representa el cociente entre las probabilidades anuales de muerte con la edad. Se comparan los cazadores recolectores con Suecia en los años 1900, 1950 y 2010 (en azul); los cazadores-recolectores con Japón en 2010 (en rojo); y los chimpancés salvajes con los cazadores-recolectores (en negro). ----------------------------------------- Los 72 años son los nuevos 30 en mortalidad humana Un estudio del Instituto Max Planck de Investigación Demográfica revela que ha habido una reducción significativa de la mortalidad humana en tan solo cuatro generaciones y que la mortalidad infantil es ahora 200 veces menor que la de generaciones anteriores. Agencia SINC "Comparamos las probabilidades anuales de mortalidad en las dos naciones que tienen actualmente el mayor índice de longevidad, Japón y Suecia, con poblaciones de cazadores-recolectores". Un equipo de investigación liderado por Oskar Burger, científico del Instituto Max Planck de Investigación Demográfica en Alemania, ha utilizado datos de mortalidad de las poblaciones modernas de cazadores-recolectores –cuyas historias de vida son similares a las de las generaciones del pasado– para colocar en un contexto evolutivo general la reciente caída de la mortalidad humana. El estudio se publica en la revista PNAS. “Comparamos las probabilidades anuales de mortalidad en las dos naciones que tienen actualmente el mayor índice de longevidad, Japón y Suecia, con poblaciones de cazadores-recolectores. Los datos de estos últimos los utilizamos como patrón típico o promedio de supervivencia de nuestro pasado evolutivo humano antes de la revolución agrícola y preindustrial”, declara a SINC el investigador. Los individuos aborígenes pertenecían a grupos como los hadza de Tanzania (Africa), los !Kung de África del Sur o los agta de Filipinas. El objetivo de Burger era saber cuánto se había alejado la población más longeva del mundo de los patrones de mortalidad humana típicos. Para ello compararon las curvas de mortalidad para cada población y analizaron la media de edad a la que había mayor probabilidad de fallecimiento. Los cazadores-recolectores a la edad de 30 años tienen la misma probabilidad de morir que individuos japoneses a los 72 años Una capacidad sin precedentes Según sus resultados, los cazadores-recolectores a la edad de 30 años tienen la misma probabilidad de morir que individuos japoneses a los 72 años, “haciendo de los 72 los nuevos 30”. “La información sobre los pueblos cazadores-recolectores la recogieron antropólogos que fueron a vivir con estas poblaciones. Nuestros estudios indican que su media de mortalidad está más cerca de los chimpancés, nuestros parientes más cercanos, que de los seres humanos de algunos países industrializados”, apunta el investigador. Este hallazgo demuestra que la capacidad de las personas para prolongar su vida no tiene precedentes, lo que sugiere que la disminución de la mortalidad no se debe a las modificaciones genéticas, sino al ambiente. Los científicos señalan que es necesario seguir investigando para entender qué hace que la mortalidad humana sea tan maleable. “Todo lo que sabemos es que los intentos anteriores para estimar el límite de la esperanza de vida humana han fracasado. La esperanza de vida no va a seguir creciendo al ritmo actual para siempre, pero hasta qué edad se elevará sigue siendo una cuestión abierta”, concluye Burger. Los autores comparan este aumento en la longevidad humana con la observada en estudios previos sobre moscas de la fruta seleccionadas y criadas para vivir más tiempo. Referencia bibliográfica: Oskar Burger, Annette Baudisch y James W. Vaupel. “Human mortality improvement in evolutionary context” PNAS www.pnas.org/cgi/doi/10.1073/pnas.1215627109 FUENTE:http://www.intramed.net/

Los modelos predictivos de mortalidad por cáncer de vejiga incluyen los telómeros y factores psicológicos.

El desarrollo de los modelos predictivos de mortalidad basado en combinación de biomarcadores y factores de estilos de vida tendrán un papel relevante en los modelos bioactuariales del seguros de vida y salud. El artículo que se reproduce a continuación nos habla de este tema y es un claro ejemplo de este cambio escenario. José Miguel Rodríguez-Pardo. ------------------------------------------------------------------------------------ ---------------------- La depresión y el acortamiento de los telómeros, Mayor mortalidad del cáncer de vejiga La combinación de los telómeros acortados, un marcador biológico de envejecimiento asociado con el desarrollo del cáncer y la depresión elevada mortalidad significativamente afectados de cáncer de vejiga, según los datos presentados en la 11 ª Conferencia Anual de la AACR Internacional sobre Fronteras en la Investigación de Prevención del Cáncer, celebrada en Anaheim, California, octubre . 16-19, 2012. "Encontramos que los pacientes con cáncer de vejiga con telómeros más cortos y altos niveles de síntomas de depresión tienen un riesgo tres veces mayor de mortalidad", dijo Meng Chen, Ph.D., epidemiólogo de la Universidad de Texas MD Anderson Cancer Center en Houston. Como parte de un proceso continuo, a gran escala estudio epidemiológico de cáncer de vejiga, Chen y sus colegas recolectaron información clínica y de salud mental en 464 pacientes con cáncer de vejiga. Se evaluaron los niveles de depresión de los pacientes con el Centro de Estudios Epidemiológicos Depression Scale (CES-D). Los síntomas de depresión solo afectó la mortalidad: Los pacientes con CES-D resultados de 16 o más tenían una supervivencia media de 58 meses, mientras que aquellos con puntuaciones por debajo de 16 tenían una supervivencia media de más de 200 meses. Además, los pacientes con CES-D resultados de 16 o más tenían un riesgo 1,89 veces mayor de mortalidad por cualquier causa en comparación con los pacientes con CES-D resultados de menos de 16 años. Longitud de los telómeros se midió a partir de muestras de sangre de pacientes. El análisis univariado reveló que los telómeros largos se asociaron con una mejor supervivencia, pero este resultado no fue significativo en el análisis multivariado. Cuando se evalúa la combinación de la depresión y la longitud de los telómeros, los investigadores encontraron que, en comparación con los pacientes sin síntomas de depresión (es decir, el CES-D resultados menos de 16) y telómeros largos, los pacientes con síntomas de depresión (es decir, el CES-D puntuaciones de 16 o mayor ) y los telómeros cortos demostrado más de un riesgo tres veces mayor de mortalidad y significativamente menor supervivencia libre de enfermedad (31,3 meses frente a 199,8 meses). Aunque los mecanismos detrás de estos hallazgos deben ser promovido estudiado, "estos resultados sugieren la posible función importante de los factores psicológicos para mejorar la supervivencia en pacientes con cáncer", dijo Chen. Además, los investigadores apuntaron a la evidencia de que dejar de fumar, perder peso y aumentar la actividad física puede reducir el acortamiento del telómero y, potencialmente, mejorar la supervivencia. "En términos de la construcción de un modelo de predicción de la mortalidad por cáncer de vejiga, los modelos actuales sólo se centran en variables clínicas, como el tratamiento y el estadio tumoral y grado", dijo Chen. "Nuestro estudio sugiere que los factores psicológicos y tal vez los cambios de estilo de vida se podrían incluir en este modelo de predicción". Fuente: http://www.datoanuncios.org

viernes, 19 de octubre de 2012

III FORUM DE PREVISIÓN COLECTIVA BBVA SEGUROS.

Dentro del programa del III Forum de Previsión Colectiva de BBVA Seguros,celebrado en Megève(Francia) en octubre de 2012,he presentado la ponencia de La edad biológica: Medida real del riesgo de longevidad. Una de las conclusiones relevantes de la conferencia es el nuevo escenario que se abre para el sector asegurador,donde el proceso de mutualización se verá sustituido por una individualización absoluta del riesgo,en efecto,mediante biomaracadores se podrá determinar la esperanza de vida de un solicitante a un seguro de vida o salud. Con los citados biomarcadores se podrá determinar la edad biológica de un individuo,edad que puede diferir de la cronológica en mas menos 15 años. En tanto esta forma de fijar el riesgo se consolide en base a la capacidad predictiva de las pruebas a utilizar ,la mejor manera hoy para medir el riesgo de mortalidad es la utilización de los modelos predictivos con técnicas GLM,donde se combinan variables sociodemográficas,finacieras, estilo de vida.... Ahora bien,estas técnicas que son habituales del seguro no vida, deben ser asimiladas por los actuarios de vida,en caso contrario se encontraran en un claro proceso de obsolescencia programada, José Miguel Rodríguez-Pardo.

viernes, 12 de octubre de 2012

EL ÁCIDO GRASO OMEGA 3,RETRASA EL RELOJ BIOLÓGICO.

Tomar suplementos de ácidos grasos omega-3 los ácidos grasos puede reducir la velocidad de un proceso biológico clave relacionada con el envejecimiento, según investigadores de la Universidad Estatal de Ohio, EE.UU.. El estudio mostró que la mayoría de los adultos de mediana edad con sobrepeso, pero por lo demás sanos, tomar suplementos durante cuatro meses en conserva pequeños segmentos de ADN en las células blancas de la sangre. La investigación se llevo a cabo en una población de más de 100 adultos jóvenes y mayores (edad media de 51 años), con sobrepeso u obesidad y con un estilo de vida sedentario, los investigadores le dieron a algunas de las personas que participaban en el estudio un placebo, mientras que otras le dieron a tomar ya sea 2.5 gramos o 1,25 gramos de ácidos grasos omega 3. Los investigadores también consideraron el consumo, en cada participante, de ácidos grasos omega-6 (el tipo de grasas poliinsaturadas que se encuentran en los aceites vegetales), ya que se estima que los estadounidenses tienden a consumir dietas ricas en ácidos grasos omega-6 y baja en omega-3. Estos segmentos, llamados telómeros, disminuir con el tiempo en muchos tipos de células como consecuencia de la edad. Los telómeros son fragmentos de ADN que se encuentran al final de los cromosomas y mantienen las cadenas de doble hélice de nuestro ADN y ayudan a nuestras células se dividen. Cuando los telómeros se acortan puede conducir a la inactividad o muerte celular, mientras que al mantener mayor longitud beneficiarían la actividad celular. De hecho, las personas de 60 años o más con telómeros más cortos son “tres veces más propensos a morir por enfermedad cardíaca y ocho veces más probabilidades de morir de enfermedades infecciosas”, según Centro de aprendizaje de las ciencias de la Genética de la Universidad de Utah. El alargamiento de los telómeros en las células inmunes es más frecuente en personas que han mejorado sustancialmente la proporción de ácidos grasos omega-3 en comparación con otros ácidos grasos en su dieta. La suplementación con omega-3 también se reduce el estrés oxidativo, provocado por el exceso de radicales libres en la sangre, aproximadamente el 15% en comparación con los efectos observados en el grupo que recibió sólo placebo. "El descubrimiento de los telómeros es provocativo ya que sugiere la posibilidad de que un suplemento nutritivo puede hacer una gran diferencia en el envejecimiento", dijo el líder del estudio, Jan Kiecolt-Glaser. Estudios anteriores han demostrado que los suplementos de ácidos grasos omega-3 ácidos grasos reduce la inflamación en el mismo grupo de adultos. "La inflamación, en particular, es la base de muchos problemas de salud. Cualquier cosa que reduzca la inflamación potencialmente tiene varios efectos entre las personas mayores sanas", dijo. El estudio fue publicado en la revista Brain, Behavior, and Immunity F. http://blog.codeconutrilife.com. Dra Reina. F http://www.isaude.net/es

jueves, 11 de octubre de 2012

LONGEVIDAD EN LA EDAD MEDIA.

Los datos básicos sobre la duración de la vida en la Edad Media los proporcionan los estudios antropológicos de los esqueletos encontrados en las excavaciones arqueológicas. Actualmente, los antropólogos disponen ya de un espectro de muestras suficientemente amplio como para empezar a determinar la esperanza de vida de la población medieval. Ante todo se observa una diferencia notable entre hombres y mujeres por lo que respecta a su número y longevidad. En realidad, la duración de la vida disminuyó en relación al período precedente (700-1000), tanto para los hombres como para las mujeres, aunque más para estas últimas. La dureza del trabajo en el campo redujo en unos dos años la esperanza media de vida de los hombres respecto a las mujeres, pero a pesar de ello, su longevidad fue bastante mayor que la del hombre moderno, hasta bien entrado el siglo XVIII. Los datos mejor conocidos proceden de las islas Canarias, donde la esperanza de vida era de 49,4 años para los hombres y de 53,3 años para las mujeres, y en el priorato de Gallen, en Irlanda, cuyos monjes tenían una esperanza media de vida de 48,4 años. Los terratenientes varones de la Inglaterra del siglo XIII tenían casi la misma esperanza de vida. Los habitantes de los asentamientos escandinavos de la costa tuvieron mejor suerte que los del interior, por lo que se refiere a longevidad. Los hombres de Groenlandia tuvieron con mucho el peor récord en cuanto a brevedad de vida. Tampoco fueron mejor las cosas para los habitantes del centro de Europa. En cambio, los de la península Ibérica disfrutaron probablemente de mayor longevidad, como ya la tenían en tiempo de los romanos, porque las tierras peninsulares, altas y secas, eran resistentes a la propagación de la tuberculosis y de la malaria, probablemente las dos enfermedades que ocasionaban más muertes en aquellos tiempos. En el siglo XIII, los miembros de la comunidad judía de Montju'ic (Barcelona) muestran una esperanza de vida de entre 45 y 50 años tanto para hombres como para mujeres. Las indagaciones post mortem que se hacían en Inglaterra permiten determinar con exactitud la edad de la muerte. Algunas personas vivieron muchos años: Alina de Marechale, de quien se cuenta que tenía noventa años cuando heredó sus tierras, vivió otros siete años más. Tres generaciones de la familia Colewik vivieron más de ochenta. Yusuf ibn Tasfin, el poderoso emir almorávide, contaba, según se decía, cien años cuando murió en 1106. Y la lista podría alargarse. Aunque el promedio de vida era corto, la gente del Medioevo tenía un margen de vida -longevidad potencial- bastante similar al actual. El índice de mortalidad, como es de esperar, era elevado: alrededor de un 3,5 % anual. La pérdida de trabajo potencial durante los años de plenitud física fue realmente grande. Durante los años de mayor productividad, de los catorce a los sesenta, la Edad Media dispuso solamente de un 57 % de la población activa femenina y de un 66 % de la masculina. Actualmente, la sociedad dispone de más del 90 %. El feudalismo tuvo, además, un punto débil que se olvida con frecuencia: el promedio de vida de caballeros y señores. Un ejército feudal, suponiendo que prestaran servicio la mayoría de los caballeros, debía de tener a más de la mitad de sus miembros con una edad bastante superior a los treinta años, edad relativamente avanzada para un atleta. En cambio, un ejército mercenario, reclutado por reyes adinerados, podía ofrecer un contingente de caballeros jóvenes y ambiciosos, más robustos y mejor adiestrados que los componentes de una hueste feudal. Fuente Consultada: Historia Universal Salvat Tomo 10 www.portalplanetasedna.com.ar

Una proteína que promueve la longevidad:SIRT1

Una proteína que enlentece el envejecimiento en ratones y otros animales también protege contra los efectos nocivos de una dieta rica en grasas, incluyendo entre ellos a la diabetes, según lo hallado en un nuevo estudio a cargo del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), en Cambridge, Estados Unidos. Leonard Guarente, profesor de biología del MIT, descubrió hace más una década que la SIRT1 promueve la longevidad, y desde entonces ha explorado el papel de esta proteína en muchos tejidos diferentes del cuerpo. En su nuevo estudio, el equipo de Guarente analizó qué sucede cuando la SIRT1 no está presente en las células adiposas, las cuales conforman el tejido graso del cuerpo. Cuando los ratones del estudio fueron sometidos a una dieta rica en grasas, los que carecían de esta proteína comenzaron a desarrollar trastornos metabólicos, como por ejemplo diabetes, mucho antes que los ratones normales. El hallazgo plantea la posibilidad de que futuros fármacos que mejoren eficazmente la actividad de la SIRT1 puedan ayudar a proteger contra enfermedades asociadas a la obesidad. Los investigadores también comprobaron que a medida que los ratones normales envejecían, se volvían más susceptibles a los efectos de una dieta rica en grasas que los ratones jóvenes, lo que sugiere que perdían los efectos protectores de la SIRT1 a medida que envejecían. Se sabe que el envejecimiento incrementa la inflamación, por lo que Guarente está estudiando ahora si la inflamación que aparece al envejecer también provoca pérdida de la SIRT1. Guarente hizo los primeros hallazgos sobre los efectos de la SIRT1 y otras proteínas sirtuínas mientras estudiaba levaduras en la década de 1990. Desde entonces, se ha mostrado que estas proteínas coordinan varias redes hormonales, proteínas reguladoras y otros genes, ayudando a mantener vivas y sanas a las células. En los últimos años, Guarente y sus colegas han suprimido al gen en órganos como el cerebro y el hígado, para observar sus efectos con mayor precisión. Una investigación anterior de este equipo reveló que la SIRT1 protege al cerebro contra la neurodegeneración presente en las enfermedades de Alzheimer, de Huntington y de Parkinson.
FUENTE:http://noticiasdelaciencia.com

A los 132 años, murió la mujer más anciana del mundo

Antisa Khvichava mostraba su documento para certificar su edad, pero ¿por qué lo hacía? Ella se había convertido en la mujer más anciana del mundo y llegó a cumplir 132 años. Desde su humilde casita en Georgia, había confesado la clave para la longevidad: una copita de vodka por día. Khvichava nació en Rusia el 8 de julio de 1880, tuvo tres hijos, dos de los cuales murieron durante la crisis de la posguerra de la Segunda Guerra Mundial, 12 nietos, 18 bisnietos y 6 tataranietos. Además, de cuidar de su familia, se mantuvo activa: "Siempre estuve sana y trabajé toda mi vida en mi casa y en la granja”, decía con orgullo. A ella le gustaba jugar al Backgammon, práctica que sin embargo tuvo que suspender cuando fue perdiendo la destreza en los dedos, producto de su avanzada edad. Habiendo estado muy cerca del siglo y medio de vida, hoy falleció. Sin embargo, sus familiares aseguraron que siempre gozó de muy buena salud. En los últimos años, apenas sufrió algunas complicaciones para caminar, por lo que se quedaba la mayor parte del tiempo recostada en la cama o sentada, pero nunca perdió su vitalidad y buen humor, al que ayudaba con su tradicional vasito de la bebida blanca.
fuente:http://www.infobae.com

domingo, 7 de octubre de 2012

Nanopartículas contra el envejecimiento.

Se ha publicado en el diario Teinteresa un artículo que nos habla de una nueva estrategia contra el envejecimento. Reproduzco por su interés la información publicada en dicho diario el 2 de octubre de 2012,http://www.teinteresa.es José Miguel Rodríguez-Pardo. ................................................................................................. Un equipo del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha participado en la creación de un nanodispositivo que sienta las bases para el desarrollo futuro de nuevas terapias contra el envejecimiento. El sistema consiste en nanopartículas que liberan selectivamente sustancias de uso terapéutico en células humanas envejecidas. El hallazgo, publicado en la revista Angewandte Chemie, permite el tratamiento de enfermedades que implican degeneración tisular o celular (cáncer, alzhéimer o párkinson), hasta el de patologías de envejecimiento acelerado (progerias). Detrás de este trabajo se encuentra el Instituto de Biología Molecular y Celular de Plantas, el Centro de Reconocimiento Molecular y Desarrollo Tecnológico, el Instituto de Investigaciones Biomédicas, el Centro de Investigación Biomédica en Red (CIBER) de Enfermedades Raras y el CIBER en Bioingeniería, Biomateriales y Nanomedicina. Ramón Martínez Máñez, de la Universitat Politècnica de València y uno de los autores del estudio, explica que "el nanodispositivo se abre de forma selectiva en células en fase degenerativa o células senescentes". La senescencia es un proceso fisiológico del organismo para eliminar células envejecidas o con alteraciones que pueden comprometer su viabilidad. "Cuando somos jóvenes los mecanismos de senescencia previenen, por ejemplo, la aparición de tumores. El problema es que con la edad las células senescentes se van acumulando en órganos y tejidos, alterando su correcto funcionamiento", afirma José Ramón Murguía, investigador del Instituto de Biología Molecular y Celular de Plantas. Murguía señala que la eliminación de dichas células ralentizaría la aparición de enfermedades asociadas al envejecimiento. “Nuestro trabajo demuestra que se puede desarrollar una terapia selectiva contra dichas células”, apunta. El caso de la disqueratosis congénita Los investigadores evaluaron la utilidad de los nuevos nanodispositivos en cultivos celulares primarios derivados de pacientes con disqueratosis congénita, un síndrome de envejecimiento acelerado. Dichos cultivos presentaron un alto porcentaje de senescencia, caracterizada por elevados niveles de actividad de betagalactosidasa, una enzima distintiva del estado senescente. “Las células envejecidas sobreexpresan esta enzima. Las nanopartículas que hemos diseñado se abren ante su presencia, liberando su contenido para eliminar las células senescentes, prevenir su deterioro o incluso reactivarlas para su rejuvenecimiento”, expone Murguía. “Hay un número importante de enfermedades asociadas con el envejecimiento prematuro de algunos tejidos, para las cuales no hay alternativa. Estas nanopartículas representan una oportunidad única de suministrar compuestos terapéuticos de forma selectiva a los tejidos afectados y rescatar la viabilidad y funcionalidad de los mismos” explica Rosario Perona, investigadora del Instituto de Investigaciones Biomédicas. Terapias cosméticas El siguiente paso será probarla con agentes terapéuticos y validarlo en modelos animales. “Es la primera vez que se ha descrito una nanoterapia para células senescentes. A pesar de que el camino hasta la posible eliminación de dichas células aún es largo, creemos que nuestro trabajo puede abrir nuevas vías para el desarrollo de terapias frente a las enfermedades relacionadas con la edad”, indica Martínez Máñez. Según confirman los autores, el nanodispositivo diseñado puede ser útil además para el desarrollo de terapias cosméticas de uso tópico para el cuidado y embellecimiento de la piel y el cabello, con efecto antiarrugas o antienvejecimiento, como protector contra la radiación UV o para hacer frente a la alopecia, todos ellos asociados a la acumulación de células senescentes.

viernes, 5 de octubre de 2012

Conferencia : Longevidad y edad biológica.

Dentro del programa de trabajo interno de Towers Watson celebrado en Ávila ,he tenido la oportunidad de pronunciar una conferencia coloquio sobre el riesgo de longevidad y las repercusiones que podría suponer el prescindir de la edad como parámetro central de riesgo en el seguro de vida. Las distintas aportaciones de los profesionales que participaron en la ponencia, sirven para conformar mejor criterio sobre estos asuntos. José Miguel Rodríguez-Pardo.

jueves, 4 de octubre de 2012

Modelos predictivos aplicados en el seguro de Vida

Los mismos argumentos que sirvieron al Tribunal de Justicia de la UE para prohibir a partir de diciembre de 2012 que las aseguradoras puedan considerar al sexo como un factor a tener en cuenta a la hora de calcular las primas (sentencia Test-Achats) podrían servir para extender la prohibición de utilizar ese factor discriminante del género a la edad. Bruselas podría estar analizando esta posibilidad según se temen algunas entidades, razón por la que las aseguradoras deberían empezar a plantearse cambiar el sistema de cálculo actuarial tradicional en el seguro de Vida e incorporar modelos predictivos, según ha explicado José Miguel Rodríguez-Pardo, profesor UC3M-ICEA-IEB, en las jornadas ‘Modelos predictivos aplicados en el seguro de Vida’, organizadas por ICEA y patrocinadas por Swiss Re. A juicio de este experto, esa posibilidad de que se prohíba utilizar la edad como factor para calcular el precio de la póliza es una de las razones por la que el escenario actual es el propicio para implantar estos modelos. Además, destaca que la edad cronológica ya no sirve en todos los casos para medir el riesgo de mortalidad: “Por debajo de los 60 años es irrelevante para explicar el riesgo de mortalidad; y a partir de los 100 la tasa de mortalidad se mantiene constante, por lo que tampoco es relevante”. José Miguel Rodríguez-Pardo explica que estos modelos se utilizan ya en muchas industrias y en 5 años será una herramienta común en el sector asegurador, tanto en mercados maduros como en los que lo son menos, como el español. Una de las principales dificultades para el actuario o suscriptor es elegir los factores que van a determinar el riesgo de mortalidad en un modelo predictivo. Entre ellos se pueden incluir los de riesgos personales, como el sexo (ya no se puede), la edad (quizá en un futuro tampoco) o rasgos intrínsecos de salud; factores inherentes al producto, como la cartera o la razón de compra; o factores relacionados con la modalidad del contrato. Según explica, se trata de modelos muy exigentes en datos, y en este sentido incide en la importancia de las redes sociales: “Quien domine los datos disponibles en la red será el ganador en cualquier tipo de negocio, también en el seguro”. En las mismas jornadas, Miguel Usabel, director Cátedra PWC-Universidad Carlos III de Madrid de Investigación Actuarial, explicó que a través de los modelos predictivos se puede explicar la mortalidad y la caída de las carteras, lo que, a su juicio, tiene un valor incalculable porque dará información sobre el nicho de la cartera que interesa retener, que es aquella con tasas de fallecimiento más pequeñas y tasas de abandono altas. Al tener localizados a este tipo de clientes, las compañías podrían actuar con técnicas de marketing o precio para evitar que se vayan a otra entidad. Fuente Aseguranza. 04/10/2012

La edad ya no explica el seguro de Vida a la hora de tarificar.

La edad ya no explica el seguro de Vida a la hora de tarificar Jornada de ICEA sobre modelos predictivos aplicados en el seguro de Vida, patrocinado por SWISS RE Los tiempos han cambiado y los nuevos estudios que valoran las mejores formas de tarificar en el negocio de Vida están demostrando que lo que antes era fundamental hoy ya no tiene tanta importancia. Esta es una de las afirmaciones expresadas ayer en la jornada de ICEA sobre modelos predictivos aplicados en el seguro de Vida, patrocinado por SWISS RE. Realizaron esta afirmación los profesores universitarios de la Universidad Carlos III de Madrid José Miguel Rodríguez-Pardo y Miguel Usabel. El primero explicó las ventajas competitivas que los modelos predictivos pueden aportar al seguro de Vida, entre las que destacó que mejorará la manera de hacer 'pricing' y generará menores costes en la realización del seguro al automatizar los procesos. No es difícil aplicar estos modelos a Vida Señaló también que los modelos predictivos aplicados a Vida “no son más que técnicas normales que se aplican en muchos negocios y también en el negocio No Vida y aplicarlo no es complicado”. Reafirmó esto al afirmar que “no hay mucha diferencia entre un modelo de este tipo aplicado a Autos que uno a Vida. Cambia el periodo de exposición, pero las técnicas subyacentes son iguales”. Sobre la edad, afirmó que “la edad cronológica no captura el riesgo de mortalidad”, e indicó, basado en una serie de tablas elaboradas en Estados Unidos, que por debajo de los 60 años la edad no tiene influencia y a partir de los 100 pasa lo mismo. Además, considera que el actual “es el mejor momento para cambiar el modelo actuarial usado. Ya no sirve para el negocio de Vida”. Apuntó además que la utilización de estos modelos predictivos puede tener otras aplicaciones como es el marketing o la segmentación en las redes sociales. Por su parte, el profesor Miguel Usabel habló de la metodología actuarial aplicada a los modelos predictivos. Basándose en datos reales, explicó los beneficios de la utilización de estos modelos. Concluyó su exposición indicando que el patrón debe ser dinámico y que no tiene sentido hacer un modelo que no se va a revisar. También matizó que cada patrón es específico para cada tipo de cartera y que para hacer el mejor princing habría que mezclar tanto las tasas de mortalidad como los datos de la caída de cartera. No es el fin de los suscriptores Después del descanso se habló sobre el papel de la suscripción y su ‘espacio’ dentro de estos modelos predictivos. La ponencia corrió a cargo de Paloma Fernández, manager L&H Underwriting de SWISS RE Europe, Sucursal en España. Rotundamente indicó que sí hay espacio a pesar de la utilización de procesos más automatizados, simplemente hay que adaptarse a los cambios. Señaló que “con los modelos predictivos el suscriptor tiene que dar una vuelta total a su trabajo. Hasta ahora se detectaba ‘quién es el malito’ y ahora hay que valorar quiénes tienen los mejores riesgos”. Otro de los cambios, comentó Fernández, es que el suscriptor tendrá que “empezar a conocer bien la cartera y tener más calidad en los datos que posee”. En su charla mencionó también que hay que darle importancia a otros factores predictivos que a partir de ahora serán más importantes: estado civil, residencia, ingresos, educación, hábitos de vida u otros muchos de carácter financiero. Cerró el acto el Predictive Underwriting Consultant de SWISS RE UK, William Trump, quien habló de la importancia de los datos que se poseen y cómo sacarles el mejor provecho. Indicó que el objetivo último de la calidad de los datos tienen que llevar a que el seguro de Vida sea más fácil de suscribir, contar con más datos del cliente con el fin de ajustar más las primas según los riesgos de cada uno. BDS, Edición de 4 de octubre de 2012

Los modelos predictivos de seguros incluyen como variables el nivel renta o la formación

Interesante artículo publicado en el diario el Economista en este mismo mes de octubre, que nos habla de la problemática que se suscita en las entidades aseguradoras al incorporar variables predictivas en el proceso de pricing. La introducción de este tipo de variables socio-demográficas puede abrir un debate de tipo ético. José Miguel Rodríguez -Pardo. .................................................................................... Las prácticas que algunas de las mayores aseguradoras del mundo están llevando a cabo han alertado a asociaciones de consumidores en EEUU, que denuncian que el precio de la póliza de algunas empresas varía en función de factores totalmente ajenos a la conducción tales como el estado civil del tomador, su volumen de ingresos o su nivel de formación. La Federación de Consumidores de América asegura que han analizado las primas de seguros en las webs de las cinco mayores aseguradoras del país, detectando una variación considerable según cambiaban las condiciones de un mismo conductor; en este caso, una mujer de 35 años con un impecable expediente de conducción. Por ejemplo, explica el NY Times, el coste de la póliza es mucho menor si dicha mujer se declara como casada, propietaria de una casa y con un trabajo estable. Hasta en cuatro de los cinco casos estudiados, la prima se reduce al menos en un 68%. Por el contrario, el coste del seguro asciende cuando se trata de una mujer soltera que vive de alquiler en un barrio modesto o sus ingresos provienen de un trabajo temporal. ¿Se aplican esos criterios entre las aseguradoras españolas? Esta discriminación en función de factores ajenos a la conducción es una tendencia que está creciendo en EEUU pero, a día de hoy, desde la Asociación Empresarial del Seguro (Unespa) aseguran desconocer que ese tipo de prácticas se lleven a cabo en España. Por el momento, algunas compañías como Mapfre, la mayor aseguradora española, ya piden el estado civil del conductor entre la información solicitada para el cálculo de la póliza; y otros, como Línea Directa, ofrecen una póliza para jóvenes a menor precio si éstos se comprometen a no coger el coche por las noches y a no consumir ningún tipo de alcohol. Eso es lo más lejos que, hasta ahora, han llegado las aseguradoras en España, pero la propagación de las prácticas norteamericanas amenaza con contagiarse a las compañías del sector en Europa.